El hospital Reina Sofía cumple 42 años agradeciendo el trabajo de los profesionales que en este tiempo han cambiado la vida de miles de personas. Desde que el 3 de abril de 1976 el hospital se inaugurara (aunque su actividad comenzó un año antes), han sido numerosos los cambios y avances que se han ido produciendo en infraestructuras, plantilla, organización, gestión y equipamiento.
Esta mañana, más de un centenar de profesionales de las diferentes unidades asistenciales y de soporte del hospital se han reunido en el vestíbulo principal para soplar las velas de una tarta que formaba el número 42 y que ha sido repartida entre el personal, los pacientes y los usuarios que en ese momento se encontraban allí.
El cumpleaños también ha contado con la colaboración ciudadana cordobesa, que ha puesto la nota musical a una mañana muy emotiva en el complejo sanitario. El violín de Eles Bellido, la guitarra de Curro Rumbao y la voz de Auxi Belmonte han hecho las delicias de los asistentes al poner melodía propia al encuentro. La soprano ha cantado en solitario el cumpleaños feliz en primer lugar y luego ha animado a sumarse al numeroso público que ha conmemorado este aniversario.
Además, el hospital tiene preparado un detalle especial para los bebés que nazcan hoy en el complejo hospitalario y que seguirán vinculados al mismo a través de esta fecha el resto de sus vidas. Por último, en los perfiles oficiales de Facebook y Twitter del hospital se ha compartido un vídeo elaborado para la ocasión en el que una de las trabajadoras del centro cuenta la evolución del complejo hospitalario a través de sus recuerdos. Clara Luján, actualmente responsable de gestión medio ambiental en el hospital, recuerda cómo vivió la construcción del hospital siendo su padre administrador general en aquella época y cómo se ha desarrollado en él profesionalmente.
Evolución
El incremento de la actividad asistencial, las mejoras en infraestructuras, equipamiento de vanguardia y tecnología puntera, la potenciación de la investigación y la docencia han marcado estos 42 años de vida. Es centro de referencia nacional y andaluz para numerosos trasplantes, para el tratamiento de cardiopatías congénitas y para otros procedimientos, por lo que muchos pacientes andaluces y de otras comunidades son derivados para recibir aquí sus tratamientos. En estos 42 años se han realizado más de un millón de intervenciones quirúrgicas y más de 7.400 trasplantes de órganos y tejidos, y se han atendido 6,4 millones de urgencias y 1.680.000 ingresos.
Al año, este hospital de tercer nivel resuelve más de 750.000 consultas externas, 211.000 urgencias, viene al mundo una media de 3.600 bebés, se lleva a cabo alrededor de 36.000 intervenciones quirúrgicas y unos 40.000 ingresos gracias a una plantilla compuesta por más de 5.000 profesionales. Entre las infraestructuras destaca la existencia de unos 300 módulos de consultas (médicas y de enfermería) y 36 quirófanos. Asimismo, cada día los trabajadores del hospital reparten 1.800 menús, procesan más de 3,4 toneladas de ropa y mantienen las instalaciones del complejo que se componen por más de 6.600 equipos electromédicos.
Centro referente
Desde su nacimiento, el Reina Sofía ha estado marcado por el carácter vanguardista que hoy sitúa este centro del Sistema Sanitario Público Andaluz entre los hospitales más punteros, no sólo de Andalucía, sino también de España. El complejo sanitario se integra por ocho edificios repartidos por toda la ciudad (que ocupan una superficie construida de 168.000 metros cuadrados).
El hospital debe buena parte de su prestigio a sus profesionales, que trabajan a diario en estas infraestructuras y que son y han sido los artífices de los numerosos logros alcanzados en donación y trasplante de órganos y tejidos, en la introducción de la cirugía laparoscópica, el uso del corazón artificial, el empleo de la terapia celular en cardiología y pie diabético y la reciente participación de los cirujanos en el primer robot quirúrgico hecho en España con visión 3D, entre otros.
Los primeros profesionales supieron convertir la pasión por su trabajo en filosofía de vida. El sello de calidad que acompaña la marca Reina Sofía es resultado del esfuerzo y la dedicación de quienes han pertenecido y siguen perteneciendo a él. Es un referente de prestigio que sitúa Córdoba a la vanguardia en materia sanitaria. Además, los cordobeses se sienten muy vinculados a su hospital y de ahí nace un sentimiento especial. Es parte fundamental de la vida de esta ciudad que cuida de las personas en situaciones de vulnerabilidad marcadas por la enfermedad.
