El presidente la Gerencia de Urbanismo y alcalde accidental, Salvador Fuentes, quiere acabar «con la improvisación» con la que se ha actuado en los últimos meses en la ocupación del antiguo cuartel de Lepanto, y para ello, pretende consensuar un plan de usos para la mitad de este inmueble que, 30 años después de su cesión a la ciudad de Córdoba por parte del Ministerio de Defensa, sigue estando en ruinas, en desuso o infrautilizada. En este sentido, Salvador Fuentes coincide con la petición del presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC), Juan Andrés de Gracia, de elaborar un documento para fijar los usos de una superficie de 16.022 metros cuadrados todavía en desuso, repartidos entre la antigua farmacia militar, los pabellones que ocupaba la Cruz Roja, el patio central del antiguo cuartel de infantería y su galería, así como el espacio que ocupan los pabellones de viviendas militares junto a la Ronda del Marrubial, que siguen ocupados.

El plan de usos de Lepanto será «consensuado» y se basará, apunta el teniente de alcalde del PP, en dos documentos de trabajo para la adecuación de estos espacios libres realizados en los últimos diez años: el primero, fechado en mayo del 2014, firmado por los arquitectos de la Gerencia de Urbanismo Rafael L. García Castejón y Rosa Lara, y el segundo, del 2018.

«Coincidimos con el CMC en la necesidad de acabar con la improvisación. No podemos trocear una superficie como la del antiguo cuartel de Lepanto de forma improvisada. Hay que articular un plan de usos de forma definitiva y por consenso, y lo haremos de manera paralela a la segunda fase de la Ronda del Marrubial», explica Salvador Fuentes. Dos parcelas de Lepanto siguen siendo propiedad del Ministerio de Defensa y estando, por tanto, su cesión al Ayuntamiento de Córdoba pendiente de una negociación: los pabellones de viviendas y la farmacia militar. «Mientras que estén en manos de Defensa no podemos hacer nada. Habrá que respetar el ritmo de la negociación, que afecta también a Caballerizas Reales, y que esperamos esté finalizado el año próximo», comenta.

Respecto al patio central y su galería (la zona en un estado más preocupante), Fuentes ha encargado un estudio sobre la situación del inmueble «por si hubiera que actuar de forma urgente», explica. De este modo, se hará un análisis de las patologías estructurales y se plantearán «propuestas a corto y medio plazo para ver qué actuaciones se pueden realizar». «Así, sobre esa base, con el levantamiento planimétrico necesario y un estudio detalle, si aconsejan que hay que actuar de forma urgente lo haremos», añade.

HABLAR CON MERCASA/ El alcalde accidental tampoco obvia que hay que hacer frente a los «requerimientos históricos» de varios colectivos para algunos de los espacios en desuso de Lepanto: desde el centro de mayores, a la necesidad de construir unos aparcamientos, pasando por la solicitud de la Fundación Prolibertas para trasladar su comedor, o la construcción de un nuevo mercado, donde se instalarían los puestos del mercado de la Mosca. Sobre este último, el concejal de Gestión, Mercados y Comercio, Antonio Álvarez (Cs), anunció que retomará en septiembre este asunto para saber si la empresa pública Mercasa --una de las pioneras del proyecto inicial planteado por José Antonio Nieto en 2015-- siga teniendo interés en el traslado de la plaza de abastos del Marrubial a la antigua farmacia y en la construcción de un nuevo mercado.