El presidente de Caja Rural del Sur, José Luis García-Palacios, reclamó ayer más apoyo para las cooperativas de crédito. «El escenario que anhelamos es que nuestro Gobierno central» y el Banco de España «pudieran considerar a las cooperativas de crédito tal y como lo hacen» en países como Alemania, donde existen más de 700 entidades de este tipo con una cuota de mercado del 30%, Francia y Holanda. García-Palacios mostró este deseo durante la conferencia que pronunció en el Círculo de la Amistad en el marco del ciclo del Foro Economía y Sociedad, que organiza Asfaco. La ponencia sobre el origen, la evolución y la situación actual de las cooperativas de crédito fue presentada por el presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido, entidad patrocinadora.
En los países europeos citados, la banca cooperativa «es reconocida y apoyada por sus gobiernos», aseguró. Precisamente por ello, «y con la premisa de buscar siempre alianzas que nos hagan ser más sólidos, avanzamos en la colaboración conjunta, manteniendo nuestra independencia» pero «conjugando recursos y conocimientos», aseveró.
El presidente de Caja Rural del Sur explicó que esta es «la segunda caja rural en volumen de España», la «cuarta cooperativa de crédito y la sexta entidad financiera del país en fortaleza y solvencia económica». Además, indicó que cuenta con «casi 140.000 socios, más de 1.100 empleados, más de 830.000 clientes y algo más de 330 oficinas repartidas por las cinco provincias donde tenemos presencia». García-Palacios, que subrayó que «ninguna Caja Rural de España ha necesitado ayuda alguna de fondos públicos en la crisis», advirtió del fenómeno de las «fintech», que «pululan por internet y vienen a ser unas 1.500 entidades virtuales, de las que un 60%, más o menos, se someten a cierta regulación».
