La aritmética y la lectura fueron las dos asignaturas pendientes del Pleno de ayer. La falta de una mayoría absoluta, provocada por la ausencia por motivos personales y de salud de la alcaldesa, Isabel Ambrosio, y del concejal de Ciudadanos David Dorado, impidió aprobar el punto sobre Cosmos (el de más enjundia de los previstos) y provocó la retirada del resto de cuestiones de la Delegación de Urbanismo incluidas en el orden del día. Así, falló la aritmética porque los concejales de PSOE, IU y Ganemos sumaban ayer 14, y 13, los de PP, C’s y Ucor. Y falló la lectura porque inexplicablemente nadie del equipo de gobierno reparó en un informe del secretario general del Pleno, Valeriano Lavela, que advertía, a finales de septiembre, de que para aprobar puntos relativos a la innovación del PGOU hay que contar con al menos 15 votos.

Sin embargo, todo esto no impidió que hasta justo el momento en el que los grupos iban a votar el punto de Cosmos --ya se habían escuchado en la sala cinco intervenciones ciudadanas, gritos, bronca e insultos variados-- no se descubriese el pastel. El primer teniente de alcalde, Pedro García, que presidió el Pleno por la ausencia de Ambrosio, se vio obligado a suspender la sesión y a posponer la votación a un pleno extraordinario, que se celebrará el martes próximo. Lo curioso es que decidieran retirar todos los puntos de Urbanismo, incluida la modificación para la construcción de un centro comercial en Rabanales 21, para lo que sí contaban con votos suficientes (23, todos menos los cuatro de Ganemos). Lo que pudo salir adelante, con la abstención de PP, C’s y Ucor, fue la aportación de 134.000 euros del Ayuntamiento al parque tecnológico.

ADVERTENCIA DEL PSOE // Aunque se esperaba que ayer PSOE, IU y Ganemos votaran a favor de la inclusión del informe sobre la salud de la innovación del PGOU que afecta a Cosmos (un paso más hacia la modificación urbanística para impedir las valorizaciones en el casco urbano), en las intervenciones previas, el teniente alcalde de Presidencia, Emilio Aumente, anunció que su grupo tendrá que tomar «una decisión» en los siguientes pasos de la innovación (no es la primera vez que pone reparos a algo de Cosmos) y lanzó una advertencia seria a su socio de gobierno, IU, que ha propuesto trasladar la fábrica a unos terrenos adyacentes al centro ambiental de Sadeco en la Campiña. Aumente se refirió a las dificultades que están teniendo los bomberos para apagar el fuego de la empresa Recicor, en la carretera de Guadalcázar, por la falta de infraestructuras en esa zona. «Aunque no quiero comparar, el ejemplo de que no hay infraestructuras para el uso industrial 4 en la Campiña lo estamos teniendo estos días», dijo.

Las intervenciones ciudadanas sobre la cementera trasladaron al atril la tensión que se vivió en la sala, a pesar de lo cual Pedro García --principal diana de los insultos-- no mandó desalojar el Pleno. UGT pidió que se retirase la innovación y alertó de la pérdida de empleo: «A la UGT nos parece indignante que metan miedo con la salud». Delfín Fernández, presidente del comité de empresa, defendió «el criterio» de la Junta y la Unión Europea sobre la valorización; mientras que Guillermo Contreras, de Aire Limpio, sostuvo, por contra, que es perjudicial para la salud. Bernardo Abad de CCOO afirmó que la intención del Ayuntamiento es «una burla a los cordobeses», y Juan Carlos Castro, representante de la plantilla, dijo que «legislar a la carta, es prevaricar».