La responsable del Servicio de Alergología del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, Carmen Moreno, ha señalado que si bien la meteorología afecta a la incidencia de las alergias por su efecto en la polinización, el clima de Andalucía hace "difícil" para los alérgicos "huir" del polen.

La sintomatología de los alérgicos al polen va desde síntomas leves como escozor, picor y lagrimeo, estornudos hasta enfermedades importantes como es el asma por lo que la alergóloga ha insistido, en declaraciones a Efe, en "no banalizar" cuando un alérgico empeora pues puede derivar a enfermedades más importantes como las alergias a determinadas proteínas vegetales que se encuentran en alimentos.

El riesgo se conoce por medio de biomarcadores que lo identifican por lo que, "los alérgicos al ponen pueden adelantarse a los síntomas por medio del informe alergológico si han sido diagnosticados o mediante la consulta con su médico de cabecera".

"No traten de huir del polen en Andalucía porque el polen vuela mucho y muy deprisa" y las partículas que lo componen están "desde en las suelas de los zapatos hasta en la ropa o cualquier estancia de la casa", ha explicado Moreno, quien recomienda seguir rigurosamente la medicación supervisada por el médico y mantener las habitaciones cerradas y desinfectadas durante todo el día tras ser ventiladas por la mañana.

LAS PREVISIONES

Según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic), esta primavera se prevé más intensa en polinización para perjuicio de los alérgicos al polen con unos niveles de incidencia altos en Andalucía debido a que el invierno ha sido más frío, lo que ha originado el fortalecimiento de los cereales que se siembran durante estos meses, como el trigo, la cebada, la avena o el centeno; también las gramíneas salvajes que crecen solas al borde de los caminos.