La Junta ha autorizado la actividad arqueológica preventiva para el proyecto de un búnker, destinado a albergar un cuarto acelerador lineal y a la ampliación de la sala de consultas del servicio de oncología radioterápica del hospital Reina Sofía, según informó ayer la delegada de Cultura y Patrimonio de la Junta, Cristina Casanueva.

La superficie afectada por el proyecto es de 302,57 metros cuadrados. El objetivo de esta actividad arqueológica es documentar y obtener la mayor información posible sobre la ocupación histórica de esta zona. Una vez finalizada la actividad arqueológica, se presentará un informe. En caso de hallazgo de restos materiales, deberán ser inventariados y depositados en el Museo Arqueológico de Córdoba.

El presupuesto asciende a 47.834 euros. Cuando esté instalado este nuevo acelerador (que es el tercero de los equipos donado por Amancio Ortega y permitirá ofrecer tratamientos de radioterapia más precisos), atenderá a entre 400 y 500 pacientes al año