Ángel Herrador forma parte de ese grupo de caras nuevas (y ajenas) que llegaron a la política el pasado febrero para formar parte del nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía, aunque afirma no sentirse un político. Nacido en Córdoba en 1989, explica que su vida se ha desarrollado en Montilla y que finalizó sus estudios de Derecho en el 2012. Cuatro años más tarde, accedió al Cuerpo de Letrados de la Seguridad Social, lo que le llevó a un paso breve por el servicio jurídico delegado de la Seguridad Social en Córdoba. A mitad del 2017, obtuvo una plaza en la dirección provincial de la Tesorería General de la Seguridad Social en Madrid, pero con su nombramiento como delegado territorial de Empleo, Formación, Trabajo Autónomo, Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad ha regresado a Córdoba.

-¿Qué le hizo querer dar el salto a la política?

-Esto surge porque la Consejería de Empleo se pone en manos de una independiente como Rocío Blanco, que estaba al frente de la Tesorería General de la Seguridad Social en Málaga. Ella, cuando hizo los equipos directivos, confió básicamente en funcionarios. Nunca había tenido ningún tipo de inquietud política, vine porque era estar en la Administración desde otro punto de vista.

-¿Se ha afiliado a algún partido político?

-No. Yo soy totalmente independiente.

-¿Qué avances destacaría en las áreas de su competencia desde que ha llegado a ellas?

-Se ha aprobado el programa de estímulo a la creación y consolidación del trabajo autónomo, que trae la famosa tarifa plana. En el campo de la formación, hemos aprobado un plan de choque para tramitar los expedientes pendientes desde el año 2011. Queda por concluir dos que se encuentran en su fase final de reintegro. También el pago de becas. Me enorgullezco de que en Córdoba están todas ya liquidadas, pendientes únicamente de pago, a diferencia de otras provincias. Se ha liquidado un total superior a los dos millones de euros (7.000 expedientes acumulados del 2009 al 2011 y resueltos entre el 2015 y el 2019). En la actualidad, se están estudiando las becas de las acciones finalizadas en el 2018, que por el momento ascienden a 1.000. Además, hemos convocado las mesas sectoriales para llamar a los sectores productivos y que nos digan cuáles son las necesidades de formación y que en la nueva convocatoria que saldrá a principios del 2020 tengamos en cuenta lo que nos han dicho. Otra de las acciones a destacar ha sido volver a poner en marcha las comisiones de valoración de proyectos presentados a las ayudas de la agencia IDEA tras su reestructuración, iniciada en mayo, y la reactivación de las ayudas solicitadas. Córdoba recibirá incentivos por 13,2 millones de euros dirigidos a 140 proyectos, lo que conllevará una inversión privada de 33,4 millones y la creación o el mantenimiento de 1.754 puestos de trabajo.

-Siendo delegado de Empleo en una provincia como Córdoba, ¿cuál son sus principales caballos de batalla?

-Luchar contra el desempleo y esto va ligado a luchar contra la estacionalidad que tiene el mercado productivo en Córdoba. Nos encontramos como medidas que estamos impulsando para acabar con esta estacionalización en el ámbito del turismo, por ejemplo, las obras de la segunda fase del Palacio de Congresos. Una vez que culminen se tendrá una infraestructura que podrá proveer de las condiciones adecuadas para que venga el turismo congresual. En segundo lugar, en el ámbito de la agricultura, a través de promover la innovación y el desarrollo, de tal manera que se cree un polo de industria. Y, por supuesto, en el ámbito específico de distintos sectores como la madera, el frío y la joyería, conseguir que se establezca industria.

-¿Se ha fijado algún objetivo en la reducción del paro?

-Queremos poner todo lo que está en manos de nuestra acción para que las empresas generen empleo. Se está actuando a través de dos vías, fundamentalmente. Con las medidas específicas de consolidación de los autónomos y a través de la eliminación de trabas que impiden a la gente establecerse en la provincia.

-Durante un tiempo ha estado suspendido el juicio por los cursos de formación en Córdoba por la falta de un juez de apoyo, hay quien ha interpretado que no existía interés político en que se celebrase.

-Esta situación no es cuestión nuestra, sino del ámbito judicial, y nosotros no opinamos sobre la situación judicial. Colaboramos con la Justicia en todo lo que nos solicite. Lo único que queremos es que esto se depure.

-Parece que se ha recuperado muy poco del dinero defraudado a través de estos cursos. ¿Cómo es la situación en Córdoba?

-Es una cuestión de Hacienda, nosotros desde Empleo comprobamos que la subvención está bien, se dicta el reintegro y Hacienda se encarga de recaudarlo. Desde el 2015 hemos realizado liquidaciones de 126 expedientes por un importe de más de 9 millones de euros y hasta lo que sabemos se han ingresado reintegros por valor de 1,3 millones.

-Teniendo en cuenta los datos de creación empresarial, despidos, suspensiones de pagos…, ¿estamos entrando en otra crisis?

-Desde luego, los datos no son tan optimistas como a principios de año y, como han hecho todos los organismos internacionales, se está produciendo una revisión de las perspectivas económicas a la baja. Sin embargo, no creemos que estemos en una crisis, sino que claramente estamos en una recesión. Nuestras perspectivas son que se siga produciendo una disminución del desempleo y un crecimiento de Andalucía, si bien a un ritmo menor.

-La cifra de autónomos se estanca. ¿Cuántas personas han solicitado el acceso a la nueva tarifa plana?

-Son 920 solicitudes de tarifa plana las que se han hecho hasta ahora y tenemos la previsión de unos 2.680 autónomos, en tanto que la cantidad consignada en la provincia son 3,2 millones de euros.

-Hace meses se informó de que la Junta estaba analizando la situación de los parques tecnológicos. ¿Cómo está Rabanales 21?

-La situación de Rabanales 21 es distinta en referencia a otros parques tecnológicos de Andalucía. La Junta tiene una aportación minoritaria. No obstante, desde el parque se nos informa de que están cumpliendo pagos, el espacio construido está a plena ocupación y, respecto a la situación con la Junta en concreto, siguen negociando cómo será la dación en pago de solares para cubrir la deuda que tienen.

-¿La Junta se tendría que volcar más con el parque cordobés?

-Nuestro compromiso está en proporción a nuestra presencia en el capital. El parque tecnológico Rabanales 21, como cualquier otro, sí tiene el apoyo de la Consejería en el sentido de que son una figura interesante para la instalación de empresas de nuevas tecnologías. Pero en las cuestiones específicas de mayor inversión hay que tener cuidado, porque la participación de la Junta es pequeña en referencia a otros parques tecnológicos y cualquier aumento podría suponer una ayuda de Estado, lo cual también está vedado desde la UE y está muy controlado.

-Las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo gestionan muy poca contratación en comparación con otras entidades, en torno a un 2%. ¿Cómo se explica esto a un ciudadano?

-Hasta ahora estaba mal diseñado el SAE, pero estamos intentando refundarlo y que se centre en la intermediación y la orientación. Solo un 2% es una cifra irrisoria.