La Brigada Guzmán el Bueno X de Cerro Muriano será quien releve a finales de año en Letonia a su homóloga XI de Badajoz, si se cumplen con las previsiones en el marco de cooperación con la Alianza Atlántica (OTAN), dentro de un contingente liderado por Canadá y que contará, además, con militares de Polonia, Italia, Albania y Eslovenia. Lo que hace varias semanas era un rumor en la base cordobesa, a finales de la semana pasada fue comunicado extraoficialmente en algunas unidades de los regimientos que formarán parte del subgrupo táctico reforzado que desplegará en el país báltico cuando regresen las tropas extremeñas. Teniendo en cuenta que las previsiones son que el primer contingente español abra la misión en Letonia entre mayo o junio, lo normal es que las tropas cordobesas les den el relevo antes de Navidad.

La previsión es que forme parte de esta nueva misión internacional en torno a 300 militares agrupados en una sección de carros, dos de Pizarros, una de apoyo y plana de compañía, así como unidades de Logística y plana de batallón, entre otras. Precisamente, una de las novedades de esta misión española bajo mando de la OTAN será la presencia por primera vez de carros de combate Leopardo y blindados Pizarro. La sección de 6 carros de combate Leopardo, la punta de lanza del Ejército español, pertenecerá al Regimiento Córdoba 10, mientras que las dos secciones de 10-12 vehículos de transporte blindado Pizarro pertenecerán a uno de los batallones del Regimiento La Reina 2. Precisamente, la Brigada X ha recibido recientemente una veintena de estos blindados de última generación.

Según las previsiones, la misión tendrá una duración de seis meses y la presencia militar será en bases semipermanentes en Letonia, en el marco del mayor despliegue militar de la Alianza Atlántica tras la Guerra Fría frente a la frontera con Rusia. En total, el contingente militar estará formado por cuatro grupos tácticos de unos mil soldados cada uno en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia, liderados por Gran Bretaña, Canadá, Alemania y Estados Unidos, respectivamente, si bien esta última reforzará su papel con unos 4.500 militares.

De todos modos, según fuentes consultadas por este periódico, la situación en los países bálticos, que solicitaron apoyo al resto de estados miembros de la OTAN tras la crisis ruso-ucraniana, podría dar un giro en los próximos meses tras la irrupción en escena del nuevo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, cuya indefinición en su política con Rusia y sus coqueteos con su homólogo Vladimir Putin desde su llegada a la Casa Blanca podrían hacer variar las previsiones.

Letonia tiene salida al Mar Báltico, limita al este con Rusia y es miembro de la UE.

(editado a las 9.00 am)