El informe del mercado de trabajo de la provincia de Córdoba 2019 hecho público ayer por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) considera necesario una apuesta definitiva de todos los agentes para impulsar actividades generadoras de empleo estable en la provincia, en sectores como las logística, los servicios avanzados a empresas, la construcción, el transporte terrestre, las actividades orientadas a la prestación de servicios a la comunidad, como atención a personas mayores y discapacitados, o el autoempleo. Y ello pese a que en el 2018 la industria agroalimentaria y las actividades vinculadas al turismo, así como las exportaciones han permitido que en la provincia se siga creciendo empleo y reduciendo las cifras de paro, según recoge el informe.

El SEPE señala que desde el 2007 al 2012 descendió la ocupación en Córdoba en algo más de 30.000 afiliados (-31.501 personas), «habiéndose recuperado a finales del 2018 casi todo el empleo perdido (29.816)». A finales del 2018, la ocupación se incrementó con un 2,51% más de trabajadores afiliados a la Seguridad Social. La contratación registrada durante ese año aumentó un 1,26%, lo que supuso en valores absolutos 6.944 contratos más, «lejos de los casi 50.000 contratos que supuso el aumento registrado durante el 2017). Igualmente alerta el informe de la temporalidad del empleo, que alcanza el 96,35% de los contratos registrados, mientras que solo el 3,65% fueron indefinidos.

En cuanto a las posibilidades de encontrar empleo, el SEPE señala que éstas se reducen cuando aumenta el tiempo de permanencia como demandante. En este sentido, los parados de larga duración en la provincia suponían a finales del 2018 el 40,09% del total, hasta alcanzar la cifra de 26.759 personas en esta situación.

LAS MUJERES / Los mayores de 45 años, con el 53,81%, y las mujeres, con el 44,22%, son, junto con las personas con discapacidad (52,06%), los colectivos más vulnerables al paro de larga duración. Entre los parados de larga duración registrados a finales del 2018, el 66,93% eran mujeres y el 33,07% hombres.

El informe del SEPE indica también que el perfil de la persona parada en la provincia de Córdoba corresponde a una mujer de 45 a 54 años de edad, con nivel formativo de ESO, que lleva más de un año demandando empleo y que procede del sector servicios.

OCUPACIONES / En cuanto a las ocupaciones en las que más se emplean los cordobeses, no varían respecto a años anteriores. Entre las diez ocupaciones con más contratos registrados durante el 2018 destacan, según el SEPE, las agrícolas (desde peones a trabajadores cualificados); le siguen las vinculadas a la hostelería o el comercio, como camareros asalariados, vendedores en tiendas o almacenes, y personal de limpieza en oficinas u hoteles. Por último, la construcción.