La prolongada falta de precipitaciones falta de precipitacionesque se viene registrando en Córdoba este año está haciendo que la situación de los recursos hídricos se acerque a los peores resultados de la década y casi de los últimos 20 años. En cuanto a las lluvias, los datos que se manejan recogen que el penúltimo mes del año ha empezado con un déficit de precipitaciones del 83% sobre lo que debería ser la media para estas fechas.

En cuanto a las temperaturas, tanto las máximas como las mínimas (salvo las que se vienen registrando en los últimos días donde ya se aprecia un descenso) también se han encontrado, de media, por encima de lo que sería lo habitual, si bien habría que reseñar que no se han llegado a superar los valores extremos que figuran en los datos estadísticos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Entrando en datos concretos, en lo que se refiere al agua embalsada,agua embalsada en la primera semana de noviembre, según la información de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Córdoba tenía almacenados 985,4 hectómetros cúbicos, lo que supone un porcentaje del 28,8% sobre el total de su capacidad. Esta cifra se encuentra casi a la mitad de lo que se contabilizaba el año pasado por las mismas fechas, cuando las reservas se acercaban al 47%, con 1.601 hectómetros cúbicos de agua embalsada.

La cifra con la que Córdoba ha entrado en noviembre es la segunda más baja de la década, pues solo en esta misma fecha del año 2017 había menos agua que ahora. En aquel momento los embalses cordobeses se encontraban al 27,8% de su capacidad total, que es de 3.248,2 hectómetros cúbicos, con 949,7 hectómetros cúbicos. Si se alarga la vista un poco más y nos remontamos a los últimos 20 años, cuando aún no estaba construida la presa de la Breña II, que ha aumentado considerablemente la capacidad de almacenamiento de agua de la provincia, solo en el año 2008 había, porcentualmente, menos agua almacenada que ahora, pues sobre una capacidad de 2.525 hectómetros cúbicos, solo se disponía de 633,3, lo que suponía un 25,7% del total posible.

En lo que se refiere a toda la Cuenca del Guadalquivir, que excede los límites provinciales, también es considerable la escasez de recursos, pues a fecha de 8 de noviembre las reservas de agua de todos los embalses que componen la cuenca se situaba en 2.793 hectómetros cúbicos, lo que representa un 34,4% sobre total posible. En la misma semana del año pasado, las reservas se situaban en el 41,47% del total, con 4.178 hectómetros cúbicos. La media histórica de los últimos diez años la sitúa la Confederación Hidrográfica en 4.776 hectómetros o lo que es lo mismo, un 58,84%.

Con estas cifras, se puede apreciar que este año la Cuenca del Guadalquivir se encuentra 24,4 puntos porcentuales por debajo de lo que ha venido siendo la media de los últimos diez años. En lo que se refiere a la provincia de Córdoba exclusivamente, las mismas fuentes indican que los 984,5 hectómetros almacenados se quedan mil hectómetros por debajo de lo que ha sido la media de los últimos diez años por esta fecha, situada en 1,986 hectómetros. Así, cuando la media de almacenamiento de la década se situaba en 58,24%, la de este año está 30 puntos porcentuales por debajo (28,8%).

Esta escasez de recursos hídricos acumulados es consecuencia directa, como es natural, de la falta de lluvias. Según los datos de la Aemet, las precipitaciones acumuladas desde el día 1 de septiembre hasta el final de octubre en el observatorio del Aeropuerto era de 18,7 litros por metro cuadrado, cifra que queda muy lejos de la media registrada en esta misma fecha en los últimos treinta años, que es de 108,2 litros por metro cuadrado. Estos valores reflejan que han caído 89,5 litros menos de lo que es habitual y que, la ciudad presenta este otoño un déficit de lluvias del 83%.