Ana Muñoz presume de patio, no lo puede evitar, pero es que, como ella misma dice, «es parte de mi vida», una parte a la que dedica muchas horas de trabajo diario.

Desde la calle Tinte abre generosa las puertas de su vivienda, una antigua casa de vecinos que tiene su origen en el siglo XV y que, según cuenta, figuraba ya en el primer catastro de la ciudad.

Lleva 35 años participando de forma ininterrumpida en la Fiesta de los Patios de Córdoba y con su empeño se ha convertido en la decana de esta tradición, con la que ha logrado numerosos premios, entre ellos el de Cordobesa del Año a los Valores Sociales en 2017, el galardón que anualmente concede Diario CÓRDOBA para distinguir a las personas más destacadas de la provincia.

Asegura que «eso de salir por la mañana y abrir la puerta del patio es una alegría» por eso «me parece que no podría vivir en un piso». Prefiere el «fresquito» que dan sus plantas y contemplar el cielo que se deja ver entre los muros de su vivienda, en la que reside junto a su familia desde hace seis décadas. Ana cuida el vergel que se oculta en las callejas de Santiago. Por muchos años.