«El gran proyecto es resolver la situación de Caballerizas»

-Tras dieciocho años como presidente de Córdoba Ecuestre, ¿todavía tiene mucho que decir y aportar?

-Ha sido una larga travesía del desierto. Córdoba Ecuestre nace como un conjunto de voluntades que ha tardado muchísimo tiempo en generar un proyecto sólido y en tener el reconocimiento público. Ahora, sin embargo, es el momento crucial en el que Córdoba Ecuestre ha crecido, ha sido capaz de consolidarse y es cuando puede verdaderamente desarrollar un proyecto importante. Por lo tanto, es el momento en el que todas las energías que hemos volcado van a ver sus frutos.

-La nueva junta directiva que le acompaña tiene muy pocos retoques respecto a la anterior. ¿Tanta fortaleza y unidad hay en Córdoba Ecuestre?

-Hay que entender que Córdoba Ecuestre es una institución formada por otras trece entidades. Se ha ido conformado con el paso del tiempo un equipo muy compacto donde todos los miembros han tenido la oportunidad de colaborar y aportar sus ideas. En este momento hay un núcleo fundamental que lleva las tareas de gobierno. Pero todos los miembros de Córdoba Ecuestre, a través de su asamblea general, pueden colaborar en la gestión de la entidad. Creo que lo más importante de la asamblea de la última semana ha sido sin duda la unidad. Sacar la elección de presidente y de junta directiva por unanimidad significa que hemos sido capaces entre todos, y yo me siento muy orgulloso de ello, de crear un proyecto del que todos forman parte y del que todos sienten que hemos aportado algo en el curso de este largo recorrido que lleva a este momento tan decisivo.

-¿Cuáles son los proyectos más inmediatos respecto a la ciudad de Córdoba?

-El gran proyecto de Córdoba Ecuestre sigue siendo resolver definitivamente la cesión de Caballerizas Reales. Deseamos, y estamos ayudando en todo lo que nos es posible, que el Ayuntamiento de Córdoba y el Ministerio de Defensa lleguen a un acuerdo final que haga que Caballerizas Reales sean titularidad de la ciudad. Pero para nosotros lo más importante, nuestro gran proyecto, es conseguir que posteriormente el Ayuntamiento llegue a un acuerdo que nos permita seguir en Caballerizas Reales con capacidad plena de actuación y desarrollar el gran proyecto del Centro Internacional del Caballo que la ciudad se merece. Nos lo hemos ganado a pulso en el transcurso de estos últimos veinte años, trabajando intensamente en pro del mundo del caballo. Ese va a ser el gran reto y sin duda nuestro gran trabajo en estos cuatro años para todo el equipo.

-¿Piensa convertir a Córdoba Ecuestre y Caballerizas en un foco de referencia europeo en el mundo del caballo?

-En este momento ya somos un foco de referencia en Europa. Hay muy pocas escuelas que desarrollen un proyecto tan integral como Córdoba Ecuestre y que tengan la capacidad operativa de tener un espectáculo que se mueve por distintos países. Nuestra presencia en estos últimos años en Eslovenia, Francia, Italia, Hungría y, últimamente, Rusia o Marruecos muestran que nuestro proyecto es conocido, es reconocido y que formamos parte de una elite de muy pocas escuelas ecuestres que existen en nuestro continente que son capaces de tener buenos contactos, un producto de calidad y, sobre todo, de capacidad operativa para movernos con un despliegue importante de medios, tanto de caballos como de jinetes y artistas. En este sentido, Córdoba Ecuestre tiene ya un lugar en Europa y nuestro proyecto inmediato es ampliarlo y consolidarlo. Tenemos importantes contactos para el próximo año para ampliar aún más los lugares donde el espectáculo y las actividades de Córdoba Ecuestre van a ser vistas tanto en Europa como fuera de este continente.

-¿Qué proyectos tiene para ello?

-Sin duda la proyección internacional de Córdoba Ecuestre es uno de nuestros más importantes proyectos. Estamos en estos momentos en contacto con distintos países. Esto nos lo ha facilitado mucho el éxito que hemos tenido en este último año tanto en Eslovenia como en Moscú. Vamos a tener posibilidades de abrir en poco tiempo el continente americano, del que llevamos tiempo recibiendo ofertas, y que nos va a requerir un despliegue muy importante en logística para desplazar nuestro equipo y atravesar el Atlántico. Y por otro lado, también estamos mirando hacia Asia. El resultado de Moscú ha sido tan brillante que hemos recibido ofertas que nos permitirían movernos en la zona de influencia rusa en la parte asiática. Eso, unido a consolidar nuestra presencia en la Unión Europea son los grandes retos inmediatos que tenemos: consolidar Europa, abrirnos a Asia y el gran reto de estar en Estados Unidos, México y Sudamérica.

-¿Cómo valora el momento actual que vive Córdoba Ecuestre?

-En su mejor momento. Un momento de solidez, de unidad entre sus miembros, como lo demuestra el resultado de las elecciones, y un momento donde hemos equilibrado nuestras cuentas y mejorando día a día nuestra presencia en la sociedad cordobesa, además del reconocimiento que tenemos de ser un proyecto integrado en la vida de la ciudad. Seguimos trabajando para que nuestra proyección no solo se quede en Córdoba, sino que lo haga en Andalucía, España y Europa. Pero echamos en falta un mayor apoyo institucional. Seguimos reivindicando que el Ayuntamiento de Córdoba cumpla con nosotros las aportaciones económicas que regularmente venía haciendo hasta hace dos años. Creemos que trabajando juntos todos vamos a avanzar muchísimo y conseguiremos que la marca de Córdoba, unida al caballo y a Córdoba Ecuestre, que es sin duda la marca del caballo de Córdoba, sea realmente un gran valor y un gran baluarte para la imagen de la ciudad y su proyección exterior.

-¿Cómo imagina que será su final de mandato?

-Estos cuatro años van a ser fundamentales para el presente y el futuro de Córdoba Ecuestre. Si conseguimos consolidar y resolver definitivamente nuestra presencia en Caballerizas, serán sin duda los grandes años de expansión de una entidad hecha a sí misma, que ha conseguido romper todas las barreras, todos los techos invisibles y todos los tabúes que existían alrededor del mundo del caballo en Córdoba y convertirnos en una verdadera asociación referencia de la vida en la ciudad con un proyecto hecho por gente de Córdoba, jinetes de Córdoba, caballos de ganaderías cordobesas y, sobre todo, con un equipo humano que se ha ido consolidando, que tiene su base en la propia ciudad y en provincia. No voy a cejar como presidente hasta conseguir que esta situación de interinidad en la que estamos se resuelva definitivamente. No pedimos ningún trato de favor, pedimos solo justicia en el sentido de reconocer un trabajo bien hecho, de manera altruista, pensando siempre en la ciudad, en una entidad declarada de utilidad pública y sin ánimo de lucro y que está ocupando un lugar ayudando a las instituciones, fundamental en la vida de Córdoba.