El dolor de espalda constituye un problema de salud pública en general, y laboral en particular. Para lograr un buen control de esta patología, la Escuela de Espalda ocupa un lugar destacado dentro de los diferentes métodos de tratamiento, ya que tiene como objetivo modificar la actitud del paciente frente a su dolencia, haciéndole partícipe en la evolución clínica de su proceso doloroso vertebral. En la mayoría de los casos no es una enfermedad grave, aunque lo padece alrededor del 80% de las personas a lo largo de su vida laboral activa. Así, los principales contenidos de los talleres son aprender las diferentes estrategias para vivir y comprender las molestias o dolor de espalda y potenciar las habilidades del paciente para el autocuidado de su parte dorsal.

La Escuela de Espalda se inició en Córdoba en 1996 en el Hospital Universitario Reina Sofía y, desde entonces, ha atendido en este servicio a más de 5.000 personas. Con objeto de acercar esta prestación a la ciudadanía, los talleres se realizan también en los centros de salud de Poniente, Levante y Santa Rosa, puntos de atención distribuidos geográficamente de forma accesible al ciudadano y que disponen de los recursos necesarios para realizar los talleres.

El impulsor de la iniciativa y responsable de la misma es el médico rehabilitador Manuel Arias. El objetivo de la escuela es que los pacientes "interioricen los consejos que se indican sobre higiene postural y los apliquen a su vida diaria. Estas recomendaciones sirven para contrarrestar vicios al adoptar posturas cotidianas como al planchar, fregar, hacer las camas, coger cargas, vestirse o lavarse la cara flexionando las piernas, que obligan a la espalda a soportar una carga excesiva o asimétrica que aumenten el riesgo de padecer dolores de manera reiterada", asegura el especialista.

El perfil mayoritario de los pacientes que acuden a estos talleres según afirma el Doctor Arias, "es el de población activa de 18 a 65 años trabajadores y el de ama de que sufre dolores de espalda".

Cada taller consta de cuatro sesiones al mes, una por semana, de una duración aproximada de 60 minutos. Se desarrolla contenido teórico-práctico con apoyo audiovisual y un coloquio. A los talleres de accede por derivación de consulta médica y los grupos los forman alrededor de cuarenta personas.

En las diferentes sesiones se tratan aspectos relacionados con la patología vertebral, incluyendo datos básicos de anatomía, fisiopatología y biomecánica, con el objeto de que dichos conocimientos ayuden a combatir el dolor. Estos cuatro talleres se complementan con un programa de una semana de ejercicios prácticos con un fisioterapeuta.

El doctor Arias, resalta el interés y la satisfacción de los pacientes, algo que se pone de manifiesto en el incremento constante de la demanda y la larga lista de espera. "Es muy útil, y por ello se ha continuado",