El bulevar del Gran Capitán tendrá un tramo de 120 metros donde se permitirá el tráfico en doble sentido entre Ronda de los Tejares y Conde de Robledo. La medida, que el Ayuntamiento pondrá en marcha a finales de la semana próxima, permitirá la entrada de vehículos, como hasta ahora, a los aparcamientos de Edaco y del bulevar, que suman más de 700 plazas, pero, además, y ahí radica la novedad, posibilitará la salida de estos por el mismo sitio. Así, los usuarios del párking de Edaco se dirigirán hacia Eduardo Lucena y Góngora para desembocar en el bulevar, que dejarán de cruzar, ya que lo recorrerán por el mismo carril de entrada, es decir, por el lateral Este. Cabe recordar que desde enero, y con motivo del inicio de la segunda fase de las obras de la calle Cruz Conde, los vehículos procedentes de los dos estacionamientos salen de la zona atravesando de forma provisional el bulevar y que antes del comienzo de la reforma tenían el acceso por Cruz Conde y la salida por Gran Capitán. La delegada de Seguridad y Movilidad, Ana Tamayo, dio ayer a conocer estos cambios y anunció que en verano se arreglará el pavimento que se ha estropeado en el bulevar con el paso de coches.

Para habilitar un doble sentido de circulación en el bulevar, se levantarán y desplazarán los monolitos de piedra existentes --tarea que empezó ayer--, quedando dos carriles de 2,50 metros de ancho cada uno. Los hitos laterales que separan la calzada del acerado mantendrán su posición, por lo que el espacio peatonal próximo a las fachadas seguirá siendo de 1,65 metros. En Ronda de los Tejares se colocarán paneles para indicar si hay plazas libres en Edaco para evitar la circulación. Tamayo aseguró que habrá presencia policial cuando se instaure esta medida y reconoció que puede haber atascos en horas puntas en la confluencia del bulevar con Ronda de los Tejares. Aunque garantizó "la coexistencia segura entre coche y peatón", instó a circular "despacio".

Este paso resuelve una de las incógnitas que rodeaban a Cruz Conde, ya que supone eliminar de ella el tráfico de los usuarios de estos estacionamientos, por lo que al Ayuntamiento solo le queda decidir si permite el tránsito de autobuses o residentes por la vía comercial, determinación que sigue pospuesta hasta después de Navidad, ya que está pendiente del estudio de Aucorsa, que, según indicó Tamayo, espera para final de mes.

Por Cruz Conde tampoco pasarán los coches de los usuarios del párking de la calle Sevilla, que abrirá en breve. Cuando se inaugure, el Ayuntamiento pondrá en marcha otra medida de tráfico para facilitar la entrada y salida del aparcamiento que cuenta con plazas para residentes y rotación. La pilona de Valladares se desactivará y se utilizará un sistema de cuatro cámaras lectoras de matrículas --ubicadas en Ramón y Cajal, frente a la puerta del párking, en Las Tendillas y en Duque de Hornachuelos-- que controlarán la circulación. Al estacionamiento se llegará entrando desde La Victoria por Concepción y de él se saldrá por un lateral de Las Tendillas, Diego León y Alfonso XIII. Habrá paneles que informarán de la ocupación del párking en La Victoria y en Ramón y Cajal, que es donde empieza el área de acceso restringido. Si el conductor está autorizado a circular por allí, no tendrá problemas, pero, si no lo está, será sancionado si no utiliza el aparcamiento. Habrá un tiempo de cortesía para quien, al pasar por Ramón y Cajal, vea en el panel que hay plazas libres pero, después, al llegar al párking, se encuentre con que no hay.

Por otro lado, el Ayuntamiento informó ayer de dos cortes de tráfico. Uno, los días 14 y 15 en la calle Romero por unas obras de Emacsa que anulan la salida del eje Tejón y Marín. Otro, los días 13 y 14 en Alfaros por una obra de Endesa que anula la salida a Capitulares.