La empresa Corda i Nuc, organizadora junto al Ayuntamiento de la 12 edición del mercado medieval de Córdoba, confía en que la cita a lo largo de sus tres días, incluida la jornada de clausura de hoy, permita alcanzar e incluso superar la media de las visitas registradas en pasadas ocasiones, en torno a las 200.000, aunque hubo años, como el pasado, en el que el Ayuntamiento cifró entre 250.000 y 300.000 el número de visitantes, tanto de la ciudad como llegados de localidades de la provincia y del resto de Andalucía.

La cifra de visitas previstas podría quedarse corta si se tiene en cuenta la animación que ayer registraban las plazas y calles del mercado medieval, desde la plaza del Potro hasta La Corredera pasando por las calles Armas, Sánchez Peña y la plaza de Las Cañas, todo ello desde las 11 de la mañana y que se prolongó hasta la madrugada, con momentos en donde los espacios se llenaron a rebosar de visitantes, especialmente pasado el mediodía y al inicio de la noche. "Hoy hay que trabajar todo lo que se pueda", resumía Marga Durán, directora de Corda i Nuc, la firma que tras el paréntesis del año pasado (en el que la organizadora fue la empresa andaluza Fusión Medieval) ha sido la responsable de los montajes, atracciones, puestos y coordinación del mercado desde la primera edición, en el 2001.

LA CRISIS SE SIENTE De hecho, los mercaderes , en los 120 puestos instalados (el mismo número que el año pasado) tenían ayer ganas de trabajar y vender después del flojo inicio del mercado medieval, con un viernes de cielo encapotado, que ayer afortunadamente se tornó en un magnífico día de sol que invitaba al paseo y a visitar el mercado. Y todo ello, en un año donde las compras se resienten de la crisis. "Es una riada de personas lo que llega por el Arco Bajo. Ha

brá crisis, pero lo importante es que el mercado esté lleno", resumía Marga Durán ayer, sobre las 13 horas, satisfecha por la afluencia de visitantes que se estaba registrando desde horas tempranas.

POLEMICA POR LA COMIDA Magda Durán también se mostraba satisfecha porque la animación del mercado medieval se extienda por toda esta zona del Casco Histórico y beneficie "a todos los establecimientos" del entorno, además de los 14 bares y restaurantes que directamente se han incorporado al mercado medieval sacando barras a la calle con los camareros caracterizados. Una visita a algunos bares del entorno de La Corredera, a primeras horas de la tarde, parecía darle la razón a Marga Durán, ya que era difícil encontrar hueco. La responsable de la empresa organizadora contestó con estos argumentos a la polémica surgida tras el anuncio de la Asociación de Hosteleros de Córdoba, Hostecor, de estudiar acciones legales "frente a actividades sin control sanitario" por la venta de productos alimenticios y comida elaborada en la calle.

Hostecor criticó el pasado jueves lo que considera competencia desleal y "la absoluta ilegalidad que supone la manipulación y venta de productos alimenticios en la vía pública", todo ello en relación al mercado medieval, con "puestos de carne y otros productos a la intemperie, sin agua corriente ni servicios". En concreto, en este mercado los puestos de alimentos están situados en el zoco árabe, en la plaza del Potro, aunque también se cocina en el exterior en La Corredera, prohibido por el Plan de Usos de esta plaza.