A pocos días del comienzo del arranque del curso escolar en los colegios de Infantil y Primaria, el próximo martes día 10, el debate sobre la ratio en las aulas -el número máximo de alumnos permitido por clase- y la supresión de líneas y grupos en algunos colegios (relacionada en buena parte con el descenso de la natalidad) vuelve a ser uno de los temas principales de controversia entre los partidos políticos y los distintos agentes de la comunidad educativa.

Al respecto, el consejero de Educación y Deporte de la Junta, Javier Imbroda, afirmó ayer en Córdoba que Educación no se plantea aún bajar la ratio por ley a 20 alumnos por aula en las etapas de educación Infantil y Primaria, algo que requeriría, en su caso, un análisis del sistema educativo a más años vista y «ver la evolución de la natalidad».

«El sistema está ahora mismo preparado para ajustarse a la oferta, lo que no evita que la idea del Gobierno andaluz de bajar la ratio media en Andalucía siga siendo una gran noticia, porque podríamos habernos ceñido a la ratio de 25 y plantarnos ahí», afirmó el consejero, que indicó que la Junta no solo ha bajado la ratio media para este curso, «sino que incorporamos 750 docentes más al sistema educativo».

Así lo señaló el consejero después de que este martes anunciara que el curso arrancará con una reducción de la ratio media de alumnos a 20 niños en Infantil y 21 en Primaria -es decir, la media teniendo en cuenta todos los colegios andaluces, ya sean grandes o pequeños-, «la ratio (media) más baja de la última década», como reiteró en la capital cordobesa. Javier Imbroda hizo estas declaraciones momentos antes de inaugurar la jornada de formación de la Inspección Educativa Hacia la digitalización desde el Plan de Inspección, que reunió este jueves a unos 300 inspectores de toda Andalucía en esta jornada celebrada en el Conservatorio Profesional de Música Músico Ziryab.

El consejero explicó que el tema de las ratios en las aulas está relacionado, lógicamente, con la oferta de puestos escolares y la demanda real existente, recordando que este curso habrá 13.000 alumnos menos en toda Andalucía.

«Este es el verdadero problema, por qué tenemos 13.000 alumnos menos», resaltó, indicando que si la Junta quisiera «desmantelar la educación pública», como afirman los partidos de la oposición y parte del sector educativo, «se habrían reducido 520 aulas», teniendo en cuenta la ratio actual de 25 alumnos máximo que establece la normativa andaluza en vigor. Una cifra que puede elevarse hasta los 28 en el caso de aquellos centros que tienen una elevada demanda. La ratio máxima que establece la ley andaluza es la que suele ser habitual en muchos colegios -tanto públicos como concertados- de grandes ciudades como Córdoba.

Sin embargo, el anuncio de la bajada de la ratio media, junto a la supresión de algunas líneas y grupos en varios colegios, ha sido objeto de críticas tanto desde sectores de la concertada como desde sindicatos de la pública y partidos políticos.

Ayer mismo, una hora antes de la citada inauguración del consejero, el grupo municipal de Podemos denunció la supresión de 25 líneas en Córdoba capital y pidió al equipo de Gobierno municipal «tomar medidas urgentes», como potenciar la enseñanza pública «frente a la privada concertada». Poco después, Adelante Andalucía e IU de Córdoba criticaban que la supresión de 57 líneas en toda la provincia «se centra en la escuela pública y no en la privada concertada».