La Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad de la Junta de Andalucía ha dado el impulso definitivo a la ampliación del Palacio de Congresos de Córdoba, el cual, tras una análisis de las alternativas existentes y en aras a determinar la viabilidad y sostenibilidad económica de la actuación, ha finalizado con la aprobación de un informe de viabilidad favorable a la segunda fase del proyecto, que dotaría a este espacio de un aforo adicional de 500 plazas al aire libre en el Patio Mudéjar y 600 plazas en el resto de salas de reunión y seminarios pendientes de rehabilitar. En total, 1.100 plazas adicionales para el recinto congresual y expositivo, que servirían para atraer eventos de mayor entidad que los que actualmente alberga, informa la Junta en una nota de prensa.

La Dirección General de Comercio de la citada consejería ha dado luz verde al estudio de viabilidad que estima que la demanda actual de congresos en Córdoba induce a la rehabilitación y acondicionamiento del inmueble para su ampliación, cuyas obras tendrán un coste aproximado de cinco millones de euros y un plazo de ejecución aproximado de tres años, de acuerdo al contrato suscrito con la concesionaria de la explotación del Palacio en octubre de 2018. De forma inmediata, Economía ha establecido conversaciones con el Ayuntamiento de la capital "para que agilice lo máximo posible la concesión de la licencia de obras (que fue solicitada en abril de 2018), para no retrasar las obras y que la ciudad de Córdoba disponga lo antes posible del Palacio de Congresos finalizado en su totalidad", indica la consejería.

En concreto, las actuaciones a realizar en esta segunda fase de ampliación se refieren al acondicionamiento de la zona alrededor del Patio Mudéjar donde se plantea, al igual que en la zona del Patio Azul, la modernización y rehabilitación de sus dependencias, con la rehabilitación de la edificación, que supone la sustitución de la cubierta, el refuerzo de los elementos estructurales que lo requieren, la renovación de todas las instalaciones y de los revestimientos y la adaptación de los distintos espacios al uso congresual actual. Además, se ha detectado la necesidad de refuerzo del forjado de las salas.

En esta zona también se llevará a cabo la eliminación de las barreras arquitectónicas existentes con la introducción de un nuevo ascensor que comunica todas las plantas, la incorporación de las rampas que salvan pequeños desniveles y la introducción de aquellos elementos necesarios que pretenden adaptar la edificación para la accesibilidad universal. Igualmente, en este patio se tendrá especial atención con la protección y puesta en valor de los elementos de interés patrimonial que contiene la edificación. En concreto, la restauración interior de la Capilla de San Sebastián y sus retablos y la conservación del claustro del Patio Mudéjar, la continuidad del Adarve con la nueva sala de Beatriz Enríquez y el espacio contiguo a los restos emergentes de la Muralla califal que va desde el Patio mudéjar hasta la portada donde se encuentran las puertas de emergencia hacia la parcela de la Biblioteca Provincial.

Esta segunda fase también conlleva la adaptación del denominado Patio Italiano y remodelación de la cafetería y cocina y la mejora de la salida de emergencia de la sala de Ambrosio de Morales a través de la renovación de la escalera existente.

Al margen de estas actuaciones, y como paso previo a realizar la segunda fase de la ampliación del Palacio de Congresos de Córdoba, la Consejería de Economía ya está ejecutando obras previas como la adecuación y limpieza del centro de transformación, que supone la modificación de los equipos de medida e instalación de un nuevo equipo de media tensión o actuaciones previas en la capilla, consistentes en el adecentamiento, preparación, reposición de parametros, cambio de luminarias e iluminación del retablo principal y los lateales.

Además, se está realizando un seguimiento arqueológico, de carácter preventivo de las actuaciones que se llevan a cabo por un técnico competente en la materia, así como demoliciones y actuaciones previas, de revestimientos tanto horizontales como verticales, divisiones y fábricas de zonas, eliminación de carpintería y cerrajería, desmontaje de todas las instalaciones obsoletas de fontanería, electricidad, telecomunicaciones, informática, contra incendios y de climatización y ventilación.