Manuel abre la puerta de su bloque pasadas las once de la mañana y se encuentra con la calle cortada al tráfico. Vive en La Viñuela y uno de sus tramos celebra El Día Mundial sin Coche. «¿Pero qué se celebra hoy?», pregunta a su señora, que lo acompaña agarrada del brazo. «Debe ser algo del comercio, a ver si vemos un cartel», le reponde. Luego se paran a hablar con el dependiente de una tienda, que se detiene a explicarles el motivo del corte de tráfico. «¿Y se corta solo aquí?», pregunta, a lo que le informan que también se cierra un tramo de Almogávares y otro de Gran Capitán. Al hombre le parece poco. «Pues qué poca leche, para que esto haga efecto habría que cortar más calles y multar a quien saque el coche sin motivo, así sí se contaminaría menos». Luego se sienta a tomar una caña en el bar de la esquina: «Total, a mí me da igual porque como ya veo poco, no conduzco desde hace quince años». A su alrededor, el pequeño tramo cortado se llena de gente, de percheros con ropa que las tiendas han sacado a la calle y de plantas. Allá donde el tráfico se para, la vida vuelve a brotar. Ocurre igual en Almogávares, rebosante de actividad durante toda la mañana. Paqui Navarrete, vocal de la Asociación de Vecinos de Valdeolleros, explica que se han volcado todos los colectivos del barrio. «Hay gente de los colegios, de la parroquia, de asociaciones, ecologistas, de la JOC...», explica. A su lado, voluntarios explican la campaña Valdeolleros se mueve por el clima, entre el griterío de multitud de niños entregados a los juegos de calle y los que intercambian objetos en el estand del trueque. Lástima que más allá de estas calles, el tráfico sea igual al de cualquier sábado. «Hemos cortado solo un trozo de la calle para molestar lo menos posible, se trata de concienciar poco a poco a la gente, que cada vez haya más usuarios de bicicleta y que el coche se use lo menos posible», comentó, «Córdoba es muy cómoda». Pese a esa supuesta comodidad, el partido Equo reclamaba ayer nuevas normas para moverse por Córdoba. Creen que «es imprescindible una nueva normativa que incorpore los nuevos medios de locomoción y priorice al peatón, la bici y el transporte público». También piden la renovación de la flota de bicicletas y más personal en el área de movilidad. Con las tareas puestas de cara al futuro, la Semana de la Movilidad concluyó ayer sobre ruedas, con una bicicletada urbana, y música celta, la del grupo cordobés Cairdean.