Podemos e Izquierda Unida no irán juntos a las elecciones municipales del 26 de mayo en Córdoba. IU irá sola, con Pedro García, el candidato que eligió la coalición en un proceso interno de primarias, como número 1. Lo que no se sabe aún es cómo concurrirá el partido de Pablo Iglesias en la capital, después de fracasar el intento de confluencia con IU bajo el paraguas de Adelante Andalucía. Se abren ahora tres escenarios: que Podemos se una a Ganemos en Común (la coalición de partidos integrada por Ganemos, Equo y algunos miembros de Podemos a título individual), presentarse en solitario, o no presentarse (la opción que nadie se atreve a contemplar y que cristalizaría la división interna).

Un comunicado enviado ayer por la dirección local de Podemos, en el que apostaban por una confluencia «más amplia», certificó que la ruptura con IU (que se estaba cocinando desde hacía días, y que trataban de salvar las direcciones regionales tras el bloqueo en lo local y muchos meses de reuniones y debates) era ya una evidencia. «La manera de ser fieles a lo que somos, a lo que hemos votado en las asambleas y al propio trabajo ingente de un gran número de nuestros militantes para configurar este espacio que aglutine el mayor número de vecinos de esta ciudad es sumarnos a una confluencia amplia», decía el comunicado.

Patricia Carrascal, de la dirección provincial de Podemos, confirmó poco después a CÓRDOBA que las negociaciones con IU en la capital estaban rotas (los municipios son soberanos en esa decisión), pero insistía en que el proceso de primarias que llevó a cabo el partido debe prevalecer sea cual sea la fórmula de confluencia que se adopte en la capital. Precisamente, en la elección interna de candidatos se fraguó la división que tensa ahora a Podemos, ya que las dos personas que se enfrentaron en ese proceso, Juan Alcántara (que resultó ganador) y Jorge Hidalgo (que luego apostó por Ganemos en Común), son quienes encabezan las dos corrientes actuales que hay en el partido morado. La primera corriente, que ha peleado hasta el último minuto la coalición con IU, entiende que «no se puede deslegitimar» a los candidatos ya elegidos en primarias, y añade una línea roja infranqueable: no cogobernar con el PSOE. La segunda sensibilidad, más cercana a la dirección local (los que lanzaron ayer el comunicado), apuesta por una confluencia «más amplia», y estarían dispuestos a soterrar las primarias.

Precisamente, Ganemos en Común cierra el domingo la presentación de nombres para la elección de candidatos, que ratificarán el 31 de marzo. Fuentes de esta confluencia confirman que no sería lógico elegir candidatos en primarias e incluir «sin más» a los de Podemos. Ayer, desde IU no hicieron declaraciones, aunque algunas fuentes indican que están «preparados» para concurrir en solitario. Consumada ya la ruptura, todos hablarán pronto de acuerdos postelectorales.