Las asambleas socialistas de Córdoba han elegido ya a quienes quieren que vayan en las listas de la formación en las elecciones generales del 28 de abril. La dirección provincial emitió ayer una nota para informar de estos resultados, en la que indica que los socialistas con más votos para el Congreso han sido los actuales diputados Antonio Hurtado y María Jesús Serrano, y la exdelegada del Gobierno andaluz Esther Ruiz. Para el Senado, los tres primeros puestos han sido para la concejala de Montilla Aurora Barbero; el exalcalde de Villafranca Francisco Javier López y el exdelelegado de Agricultura Francisco Zurera. Todos afines a las direccionres provincial y andaluza. La nota no incluye al ministro Luis Planas (que en las ocho asambleas de la capital quedó el cuarto), pese a ser la principal apuesta de los sanchistas y de la dirección federal, que también ha promovido a Teba Roldán, después de decidir que la vicepresidenta Carmen Calvo vaya como número 2 por Madrid y no por Córdoba. Tampoco recoge el comunicado del PSOE el nombre de Pepe Mellado para el Senado (en la capital quedó el tercero en votos).

La omisión de estos nombres en el comunicado oficial ha enfurecido a los sanchistas, y vaticina cuál será la apuesta de la dirección provincial en el comité del sábado, donde deben aprobarse ambas candidaturas. Sin embargo, los estatutos recogen que será «competencia exclusiva» del comité federal la confección de las candidaturas, y es muy poco probable que dejen caer a un ministro de Pedro Sánchez.

Por su parte, desde la comisión ejecutiva provincial del PSOE se insistió en la nota de ayer en que «la democracia interna es una de las señas de identidad de este partido, en el que la militancia tiene la potestad de elegir a quienes desea que le representen en las instituciones, un derecho que hay que respetar». Esta respuesta provocó ayer que los sanchistas bromearan diciendo que a la dirección provincial le había dado un ataque de «democratitis espontánea», pese a que consideran que en el proceso de confección de listas para las elecciones andaluzas se respetó muy poco lo que las asambleas habían votado.