Patricia Peña se vio obligada a abandonar su país, Paraguay, para desarrollar su carrera científica cuando terminó sus estudios universitarios. Lo que la hace diferente a la cantidad de jóvenes investigadores que hoy buscan su futuro fuera de nuestras fronteras es que ella eligió España como destino. Desde que llegó a Córdoba, procedente de Paraguay, dice que se encandiló con la ciudad y también con la Universidad cordobesa adonde llegó con una beca de la Fundación Carolina para cursar un Máster en Nutrición y Metabolismo.

Desde entonces la pasión por la investigación de esta licenciada en Nutrición por la Universidad Nacional de Asunción creció, alimentada por haber "tenido la suerte de caer en un grupo de investigación puntero relacionado con la nutrición, el aceite de oliva y las enfermedades cardiovasculares", cuando inició sus trabajos de doctorado.

Precisamente, parte del trabajo desempeñado en el seno del grupo de investigación Nutrigenómica. Interacción genes y ambiente de la Universidad de Córdoba, que formó parte de su tesis doctoral, le ha valido este año la concesión del premio Gonzalo Miño Fugarolas, que reconoce la labor de jóvenes investigadores y tiene una dotación de 1.000 euros. Concretamente, el estudio sobre el papel real que las grasas presentes en la dieta humana juegan en el desarrollo del estrés oxidativo en pacientes con síndrome metabólico. "Es la primera vez que gano un premio y ha supuesto un empujón más para seguir investigando. Desde que terminé la carrera me ha gustado la investigación, aunque en mi país era difícil desarrollarla por falta de recursos. Por eso la oportunidad que se me ha dado aquí es inevaluable", destaca Peña.

Si bien el trabajo premiado se centraba más en la investigación básica, para comprobar el efecto de la dieta mediterránea desde una perspectiva biomolecular, en estos momentos se encuentra a punto de dar un paso más en su carrera y volver a la investigación clínica o aplicada "aunque he aprendido mucho de la investigación básica y me gusta, vuelvo a mi primer amor", asegura.

Según cuenta, en breve, su grupo iniciará una investigación sobre la relación entre dieta mediterránea y ejercicio físico y su influencia en enfermedades cardiovasculares y metabólicas, una especie de spin off del estudio Predimed, realizado en Cataluña con 7.000 pacientes.

Nutrición y deporte

Y es que Peña hace muchísimo hincapié en que la dieta mediterránea no es solo una pauta nutricional, sino un estilo de vida, con efectos muy positivos para la salud "eso es lo que queremos plasmar en nuestras investigaciones, que va más allá de la alimentación".

Sobre el actual panorama investigador en España Patricia Peña cree que está recuperándose "de a poquito. Está remontando ahora, y a los que nos gusta la investigación esto nos da esperanzas para seguir aportando cosas. A mí, España me dio la formación en investigación y también se lo debo al que fuera mi tutor, José López Miranda, por eso me gustaría aportar mucho más en el ámbito de la investigación aquí"

Porque, a pesar de las dificultades que existen actualmente en la carrera investigadora en España, Patricia se muestra optimista y ve su futuro profesional aquí, en Córdoba, aunque sin descartar estancias en el extranjero que le permitan abrir nuevas líneas de investigación en su trabajo.