Aquel «optimismo» que transmitió solo con sensaciones y datos todavía no actualizados, que dio el catedrático de Geografía Humana de la Universidad de Córdoba, José Naranjo, hace una semana durante la charla-coloquio organizada por este periódico sobre la España vaciada, fue confirmado hoy por el INE, que publicó la revisión del Padrón Municipal a 1 de enero del 2019. Según la fuente oficial del Estado, hay 12 pueblos con más habitantes que en el pasado ejercicio --ya lo dijo entonces Naranjo--, aunque también se confirmó que Córdoba, capital y provincia, sigue con su caída de habitantes sostenida en los últimos ocho años. En total, la despoblación afecta a 62 municipios, aunque los expertos siguen ofreciendo datos concluyentes de que obedece más a un problema de envejecimiento que de riesgo real de desaparición de estos, al menos en la provincia de Córdoba.

La provincia tiene 782.979 habitantes a 1 de enero de 2019, lo que supone una merma de 2.261 personas respecto al ejercicio anterior. Esta cifra supone 22.878 habitantes menos de los inscritos en el 2011, cuando tuvo lugar el máximo histórico con 805.857 vecinos censados. Desde ese año, la población no ha dejado de caer en Córdoba.

Así se refleja en los datos del padrón continuo a fecha 27 de diciembre del 2019 publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), unos datos que, por el contrario, revelan cómo la población crece en el conjunto de España (47.026.206, es decir, 303.228 más que en 2018) y en Andalucía (8.414.240 habitantes, 29.832 más que el pasado año), que continúa siendo una de las comunidades autónomas más pobladas del país.

Respecto al resto de la provincia, un total de 12 municipios de los 77 de la provincia han crecido en habitantes. La que ha experimentado el mayor crecimiento ha sido Lucena, con 75 habitantes más, pasando de los 42.530 de 2018 a 42.605 este año. El resto han sido Adamuz (+7), Alcaracejos (+13), Añora (+3), Fuente la Lancha (+1), La Granjuela (+5), Guadalcázar (+5), El Guijo (+2), Montalbán (+60), Obejo (+21), Pedro Abad (+3) y Villafranca (+10).

En Andalucía, solo Córdoba y Jaén (4.535 habitantes menos) pierden población. Málaga, con 20.664 más que en 2018, es la que más incrementa su padrón, por delante de Almería (+7.480), Granada (+2.603), Sevilla (2.502), Huelva (+1.938) y Cádiz (+1.441).

RESTO DE COMUNIDADES

Asturias, Castilla y León, Extremadura y Galicia son las cuatro comunidades autónomas que perdieron población. En términos absolutos, Castilla y León fue la comunidad más afectada por la pérdida de población con un descenso de 9.616 habitantes, seguida de Asturias con 5.444, Extremadura con una caída de 5.153 y Galicia de 2.244. Porcentualmente, la mayor caída poblacional corresponde al Principado con un -0,53%, seguido de Extremadura (-048%); Castilla y León (-0,40%) y Galicia (-0,08%).

Estos datos confirman la tendencia registrada en estas comunidades autónomas en el año 2018. Sin embargo, esta tendencia se ha revertido en el caso de Castilla-La Mancha, Aragón y Cantabria, al pasar de perder empadronados a registrar un incremento de 6.056 (+0,30%), 10.563 (+0,81) y de 849(+0,15%) habitantes respectivamente.

La Comunidad de Madrid fue la que registró un mayor incremento de la población al con 85.315 habitantes más (+1,30%) que eleva la cifra total a 6.663.394; seguida de Cataluña con 75.152 habitantes más y la Comunidad Valenciana con un aumento de 40.066.

Porcentualmente, Baleares (+1,21%) Canarias (+1,21%) Murcia (+1,04%) y la Comunidad Foral de Navarra (+1,03%) han registrado aumentos significativos por encima del 1 por ciento.

Por provincias, Asturias lidera el mayor descenso poblacional (-5.444 habitantes), y el caso de Castilla y León todas las provincias a excepción de Soria han perdido habitantes. En Extremadura la caída se produjo en las dos provincias y en Galicia solo en Lugo y Orense.

18 PROVINCIAS PIERDEN POBLACIÓN

Las provincias con pérdida poblacional fueron: Jaén (-4.535); León (-3.745) y Ciudad Real (-3.339); Badajoz (-2.817), Cáceres (-2.336); Córdoba (-2.261) y Zamora (-2.010). También han perdido población, Albacete (-619); Ávila (-858); Burgos (-112); Cuenca (-893); Lugo (-1.740); Orense (-1.642); Palencia (-1.055); Salamancha (-1.354), Segovia (-213); Teruel (-435) y Valladolid (-305).

En cuanto a las provincias que han registrado incrementos, al margen de Madrid, destacan Barcelona (+55.229 habitantes); Málaga (+20.664); Valencia (+17.138); Murcia (15.389); Santa Cruz de Tenerife (+14.473); Las Palmas de Gran Canaria (11.231); Zaragoza (+9.882); Gerona (9.097) y Tarragona (8.762).

MÁS DATOS

Por otro lado, el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía ha publicado la monografía Distribución Espacial de la Población en Andalucía, que actualiza con datos de 2018 y amplía la información ofrecida, y que pone de manifiesto que la comunidad andaluza presenta una alta concentración de la población, especialmente si se compara con cifras similares calculadas por Eurostat para el conjunto europeo, donde estos porcentajes están en torno al 44%, considerando celdas de 1 km2 frente al 14,3% en el caso de Andalucía.

De las 1.416.093 celdas que cubren los más de 87.000 km2 del territorio andaluz, 50.747 cuentan con al menos un habitante, lo que representa el 3,6% del total de celdas. O dicho de otro modo, esas celdas ocupan en el territorio, algo más de lo que ocupan los tres municipios de más extensión de Andalucía: Córdoba, Jerez de la Frontera y Écija, ha informado el Instituto de Estadística a través de una nota.

Si el mapa de Andalucía se pixela en cuadrados de 250 m de lado y se analiza la información existente en cada uno de ellos, los resultados obtenidos nos hablan con mayor precisión de lo que ocurre en el territorio. La nueva edición actualiza la información sociodemográfica a 1 de enero de 2018 con datos sobre población, afiliación a la Seguridad Social, perceptores de pensiones contributivas, demandantes de empleo del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) e información sobre relación entre el lugar de nacimiento y el lugar de residencia.

Centrando el análisis exclusivamente en aquellos en los que vive al menos una persona, la capacidad de conocer en detalle a la población y sus características aumenta considerablemente. Esto es lo que se hace en la publicación Distribución Espacial de la Población en Andalucía que se actualiza con datos de 2018 (completando asi la serie remontada a 2002) y amplía la información ofrecida.

La publicación permite disponer de información de los efectivos de población residente en Andalucía distribuidos territorialmente en una cuadrícula o malla estadística de celdas de 250m x 250m generada siguiendo los estándares europeos para la armonización de mallas estadísticas, e integrada en la malla estadística de 1 km x 1 km establecida por Eurostat. La publicación vuelve, como en cada nueva edición, a ampliar la información difundida al incorporar el número de parados registrados en cada celda así y el tiempo de residencia continuado en el mismo municipio. Todo ello es posible porque se pone en relación el territorio y la población que en él habita, a partir de la información administrativa existente en la Base de Datos Longitudinal de Población de Andalucía (Bdlpa), a través de un proceso de georreferenciación.