La mayoría de los niños cordobeses regresaron este jueves a las aulas con la ilusión intacta a pesar de que la comunidad educativa se enfrenta al curso más difícil. Los centros pusieron a prueba sus protocolos de seguridad contra el covid-19, con puntos negros en las entradas y salidas pese a ser escalonadas (algunos han solicitado presencia de la Policia Local), y con mayor incertidumbre en los servicios de comedor y aulas matinales. El estrés y la preocupación de los padres contrastó con la alegría de los niños que volvían a ver a sus compañeros y maestros tras 6 meses.

La Delegación de Educación no ofreció ayer datos sobre incidencias en la provincia y calificaron de «anecdóticas» las ocurridas. Entre lo destacable hay que señalar los cinco centros cuyas ampas han decidido no llevar a sus niños en señal de protesta o las de los colegios que han iniciado el curso aún con obras. Además, aunque cuatro docentes han dado positivo en coronavirus por PCR y están en sus casas guardando cuarentena, ningún centro se ha visto afectado por esta circunstancia.

La delegada provincial de Educación, Inmaculada Troncoso (Cs), inauguró ayer oficialmente el curso en Córdoba, en un acto «atípico» que por primera vez no se celebró, por medidas sanitarias, en ningún colegio, sino en las dependencias de la Junta de Andalucía. La delegada se afanó en lanzar un mensaje de tranquilidad a las familias y a los docentes, a quienes dio la enhorabuena por el esfuerzo realizado para hacer posible esta vuelta a las aulas. Troncoso aseguró que la Junta ha ofrecido recursos suficientes para que cada centro pudiera comenzar el curso y afirmó que «nadie nos va a quitar la ilusión de comenzar pese a las circunstancias en las que nos encontramos». La responsable de Educación subrayó la «profesionalidad, vocación y motivación» de los docentes en un curso en el que toda la comunidad educativa debe emplearse para que «los niños sientan que vuelvan a la normalidad». Recordó que es responsabilidad y obligación de las familias llevar a los niños a clase y que, de lo contrario, se iniciará el habitual protocolo por absentismo. Por último, relativizó los problemas por falta de personal en las aulas matinales y los comedores --en colegios como el López Diéguez los padres no llevarán a los niños al comedor en señal de protesta--, y recordó a los alcaldes socialistas, que han pedido más fondos para la limpieza de los centros, que el mantenimiento es competencia exclusiva de los ayuntamientos.

La matriculación acusa la baja de la natalidad

En Córdoba se han matriculado 67.123 alumnos, lo que supone un descenso importante (2.057 niños menos) respecto al curso pasado por la caída de la natalidad. En concreto, se han matriculado 757 alumnos menos en Infantil y 1.300 menos en Primaria que el año pasado. El curso se inicia en Córdoba con un refuerzo de 123 maestros para una plantilla de 12.868 profesores de Primaria y Enseñanzas de Régimen Especial y en un total de 275 centros de Educación infantil, 286 de Educación Primaria y 143 de Educación Especial, según la Junta. En cuanto a unidades, en Educación Infantil hay 1.044, 2.265 en Primaria, 211 de Educación Específica y 526 aulas de apoyo a la integración.

Un pc por maestro, una enfermera compartida

La delegada de Educación asegura que ya se está proporcionando a los centros el material higiénico-sanitario y que en las próximas semanas empezará a llegar material informático. La previsión es que cada maestro (de centros públicos y concertados) disponga de un portátil para facilitar, en caso de que fuera necesario, las clases telemáticas. Por otro lado, desde el lunes los centros conocen a la que será su enfermera de enlace. La delegada no pudo precisar el número de enfermeras que habrá, pero sí dijo que una se compartirá entre varios centros.

Solo 4 docentes dan positivo por PCR

Hasta ayer solo 4 de los test realizados a maestros han dado positivo confirmado por PCR. La delegada de Educación ofreció por la mañana unas cifras --dando cinco positivos y un número total de test distinto- que corrigió por la tarde. Según los últimos datos se han realizado 12.416 test, de los que 12.160 han dado negativo (el 4697,9%), mientras que 71 dieron positivo serológico, es decir, positivo en la primera prueba. Asimismo se indicó que 186 personas han pasado ya el coronavirus o tienen anticuerpos de la enfermedad.

Los maestros que han dado positivo no se incorporaron ayer ya que se encuentran confinados en sus domicilios.

Federación de AMPAS: Satisfacción por la presencialidad

La Federación de Ampas de la Escuela Pública, FAPA Ágora Córdoba, mostró ayer su satisfacción con la respuesta de los padres ante el inicio del curso escolar ya que, según explicó su presidente, Francisco Mora, «la inmensa mayoría de las familias han decidido, y yo creo que correctamente» llevar a los niños al colegio. En este sentido, Mora resaltó la importancia de que, en la medida que las circunstancias lo permitan, el colegio sea presencial, porque «no podemos empezar un curso igual que lo terminamos el año pasado».

En cuanto a las ampas y familias que han optado por dejar a sus hijos en casa, Mora subrayó que «están dentro de su derecho a esa reivindicación» que entiendo que «es lógica» dado «que muchas veces no se ha dado la información necesaria a las familias de cuál es el protocolo covid».

En cualquier caso el presidente de FAPA Ágora, que aglutina a cerca de 400 Ampas de la provincia, señaló la «falta de previsión» por parte de la administración ya que en su opinión los protocolos deberían haberse hecho «hace unos meses junto con la comunidad educativa» de cada centro para que las familias hubieran podido aportar su punto de vista y «para que hubiésemos conocido con suficiente antelación qué es lo que se va hacer» en los centros, lo que ha llevado a que muchos llevaran a sus hijos al colegio «un poco a ciegas».

Asadipre: Dudas por el comedor y por el absentismo

Por su parte, la directora de la Asociación Andaluza de Directores de Infantil, Primaria y Residencias Escolares (Asadipre) de Córdoba, Isabel Bernal, resaltó que «hay mucha incertidumbre por el comedor» y por la dificultad para mantener las medidas de seguridad en un mismo espacio, a pesar de que dichas medidas, por parte de los centros «son exhaustivas».

Por otro lado manifestó que el colectivo «está detectando el problema tan grave que se nos viene encima con el tema del absentismo» porque «en todos los centros va a haber un grupo» de alumnos a los que los padres decidan no llevar al colegios. Por eso ahora los directores están pendientes de conocer qué va a ocurrir en este sentido, dado que la normativa obliga a comunicar la ausencia de este alumnado.

Escuelas católicas: las extraescolares y el comedor

Antonio Guerra, presidente de las Escuelas Católicas, que cuentan con 42 centros, destacó que a pesar de que las ausencias de niños ha sido muy pequeña y han notado un descenso en las solicitudes de comedor y de actividades extraescolares respecto de otros años. No obstante mostró su confianza en que esta situación «poco a poco se vaya normalizando» e hizo un balance muy positivo del primer día de colegio, porque es una «alegría ver las aulas llenas» y porque «los niños tenían «muchas ganas».