Los representantes de la parcelación Cuevas de Altázar están dispuestos a movilizarse ante el retraso de su legalización. El presidente del consejo rector de Cuevas de Altázar, Juan Manuel León, ha dado un ultimátum a la Gerencia de Urbanismo, asegurando que si no aprueba antes del día 5 de febrero, fecha en la que tiene convocada una asamblea general, el texto refundido del proyecto de reparcelación, «habrá jaleo», ya que «propondré movilizaciones» que podrían empezar ese mismo día. Por su parte, el presidente de Urbanismo, Pedro García, afirmó a este periódico que el documento tendrá el visto bueno del organismo municipal el 8 de febrero como muy tarde, sin descartar que llegue hoy mismo al consejo rector como urgencia o se convoque una sesión extraordinaria.

El problema es que el proyecto de reparcelación, que permite la inscripción de las parcelas como urbanas en el Registro de la Propiedad, fue aprobado en diciembre del 2015 pero aún no ha adquirido firmeza, lo que, según León, ha provocado que sigan llegando recursos (tres de ellos se verán hoy en el consejo rector de Urbanismo). León asegura que Urbanismo ha tardado un año en notificar a los vecinos la resolución de diciembre del 2015 y que en una reunión celebrada a primeros de diciembre del 2016 adquirió el compromiso de aprobar el texto refundido del proyecto de reparcelación en la segunda quincena de enero, pero el orden del día del consejo de hoy no contempla este punto. La junta de compensación tiene incluso presentado desde octubre del 2016 el proyecto de urbanización, que permitirá las obras.