El ingenio y las ganas de pasárselo bien no está en crisis. Divertirse cuesta poco dinero y menos si se quiere disfrutar de lo que tendría que ser el añorado mayo cordobés, la fecha del calendario más festiva de la ciudad en cualquier año.
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Así que los vecinos de distintos puntos de la ciudad quisieron hacerle un guiño a la Fiesta de las Cruces, pues ayer tendrían que haber comenzado.
La calle Don Carlos Romero vivió con alegría toda la jornada. Desde por la mañana trabajaron residentes como Katy Romero, Aurora de Castro, Mari Loli Zamora o María del Mar Muñoz en los preparativos. Las bromas y las risas entre balcón y balcón no pararon. Cada una echó mano de lo que tenía en casa para darle el mayor colorido a una calle que se ha hecho ya famosa en la barriada de La Viñuela. Fueron muchos los que pasaron por allí, de camino al Deza de la calle Jesús Rescatado, para hacerse unas fotos y el ‘selphie’ de turno para mandárselo a los amigos por washapp.
Una calle engalanada
La calle Don Carlos Romero ya estaba a primera hora de la tarde preparada para la fiesta, engalanada con banderines, mantones de manila y cruces de mayo de vivos colores que invitaban a la sonrisa y la diversión. Más de uno comentó que solo faltaba la copita de pale cream o la cervecita de turno para ponerle la guinda al día de confinamiento obligado.
La culminación a todo el trabajo llegó a las 20.00 horas tras los aplausos que Córdoba da cada día a nuestro ‘ejército’ de sanitarios. Entonces llegó el momento de salir guapas a las ventanas y disfrutar del momento. No faltaron hasta las sevillanas que animan siempre las cruces.
Una cruz en San Nicolás
En el centro también querían alegrar el día y el recuerdo de las cruces era la mejor excusa.
La floristería Pinsapo instaló su particular cruz en la Plaza de San Nicolás. La ingeniosa creación está hecha con flores rojas y a su alrededor hay plantas de geranios, gitanillas, calas y buganvillas, vamos, las clásicas en cualquier cruz de mayo que se precie.
El gerente de Pinsapo, Rafael Cuevas, aseguró que "ha sido una iniciativa nuestra, llevada a cabo de una manera individual. Nuestra floristería está especializada en la decoración floral típica de estas fechas y por eso se nos ha ocurrido. Hemos querido que los niños y los amantes del mayo festivo puedan disfrutar de ver una cruz este fin de semana. Nuestro florista, Luis Nevado, y yo la hemos puesto".
La cruz de San Nicolás fue la estrella del día en el barrio. Pareció un ‘souvenir’, pues la gente no paró de hacerse fotos. A alguno se le ocurrió verla incluso degustando uno de los sabrosos perritos del Lucas, ahora que ha vuelto a abrir, con su bebida correspondiente, dos placeres que en estos días no tienen precio.
Algunas de las cofradías que montaban su cruz han querido también mantener la tradición, en patios o a través de Facebook de manera virtual. También fueron decorados el Pasaje Ruiz Armenta y la calle De las Lomas. Lo normal en estos días.
