Unos 150 especialistas (dentistas, neurólogos, fisioterapeutas y otorrinolaringólogos), de España y extranjero analizan durante ayer y hoy la disfunción craneomandibular y el dolor orofacial en la 25 reunión anual de la Sociedad Española de Disfunción Craneomandibular y Dolor Orofacial. La ponencia inaugural corrió a cargo del doctor Frank Lobbezoo, catedrático de la Universidad de Amsterdam, que disertó sobre la relación entre el bruxismo (apretamiento de las arcadas dentarias) y el sueño. El presidente del comité organizador de este congreso, el doctor Antonio Blanco Aguilera, expuso que el bruxismo diurno y nocturno afecta a entre un 8% y un 10% de la población adulta y ha aumentado debido al crecimiento de las situaciones de estrés y ansiedad por la crisis, lo que se asocia a su vez a las cefaleas de tipo tensional. En esta reunión se repasan las últimas novedades sobre "síntomas relacionados con cefalea y dolor orofacial; alteraciones en los movimientos masticatorios (chasquido y bloqueo) y bruxismo", destacó Blanco.

La delegada de Salud, María Isabel Baena, resaltó que "aproximadamente la mitad de la población presenta alguna alteración funcional del sistema masticatorio sin saberlo". La base del tratamiento es restablecer el equilibrio entre los músculos, dientes y articulación temporomandibular, mediante diferentes técnicas, entre ellas el uso de férulas. Córdoba cuenta con la única unidad del sistema público andaluz, a cargo del doctor Antonio Blanco Hungría, de tratamiento de los procesos agudos de articulación temporomandibular en atención primaria, que en los últimos diez años ha atendido a unos 2.000 pacientes.