Los meses de abril y mayo son, por excelencia, los de las comuniones, pero este año no veremos en las calles y jardines de Córdoba a niños ataviados para esta celebración, ya que el Obispado de Córdoba ha dicho hoy jueves que, en la actual situación de crisis sanitaria por el coronavirus, y dado el vigente estado de alarma, la celebración de este sacramento y las confirmaciones “no podrán programarse hasta que no termine el tiempo de alerta sanitaria".En estos momentos, y a pesar de que las familias esperan esta celebración con ilusión durante mucho tiempo, la prioridad del Obispado, según señala, es "atender las necesidades básicas de las muchas personas".

Esta decisión llega cuando en algunas iglesias, como San Miguel y San Nicolás, ya habían tomado la decisión de aplazar esta celebración y muchos colegios concertados habían decidido trasladarlas a los meses de septiembre y octubre.

Sin embargo, algunos alumnos de colegios públicos no han conocido hasta hoy la noticia y tenían mucha incertidumbre sobre su celebración, como el caso de un grupo de padres cuyos hijos iban a recibir la eucaristía en la parroquia Beato Álvaro en el mes de abril.

Uno de los niños que han visto aplazada su primera comunión es Pedro Nicolás, que iba a celebrarla el 18 de abril en la iglesia de Encinarejo. Según su madre, Coral, esto ha supuesto una gran desilusión para el pequeño, aunque “lo ha entendido y aceptado”. Además de la decepción, esta familia, como otras muchas, ven ahora como sus trajes quedarán en el armario a la espera de que todo vuelva a la normalidad. “Teníamos el restaurante y todos los preparativos, pero ahora, inevitablemente, hay que esperar, y lo importante es que todo esto pase", dice la madre de Pedro.