Córdoba Ecuestre exigió ayer seguir gestionando Caballerizas Reales en el caso de que el Ayuntamiento y el Ministerio de Defensa, propietario del edificio, lleguen a un acuerdo para su cesión. En una rueda de prensa, en la que estuvieron presentes casi todos los presidentes de entidades, asociaciones y clubs que conforman Córdoba Ecuestre, los asistentes mostraron su preocupación por la incertidumbre de las negociaciones entre el Consistorio y el Estado, máxime cuando el plazo de la prórroga finaliza el 14 de abril. Córdoba Ecuestre lamenta disponer solo de «rumores y comentarios» sobre la negociación, según indicó el presidente de la asociación, Rafael Blanco, en «los que se cuestiona que Córdoba Ecuestre sea la entidad que gestione Caballerizas», si se firmara el convenio de cesión.

La alcaldesa, Isabel Ambrosio, por su parte, afirmó ayer que aún es pronto para saber quién gestionará el edificio en un futuro, ya que primero hay que concluir la negociación entre el Ayuntamiento y el Ministerio de Defensa para que este último ceda el inmueble. Sobre este particular, indicó que se está tratando de cerrar un acuerdo antes del día 14. En este sentido, la alcaldesa avanzó que una vez pase a ser de titularidad municipal, se sacará a licitación su gestión para lo que «se tendrá en cuenta la experiencia y la singularidad de Córdoba Ecuestre en Córdoba, tanto como lo que han aportado todos estos años, en los que han sido los titulares de uno de los espectáculos ecuestres más importantes de Andalucía y una de las ofertas más importantes de Córdoba para aumentar las pernoctaciones», dijo. «Todo se tendrá en cuenta, pero es querer acelerar, porque primero hay que tener un acuerdo con Defensa».

CON APOYO DE CECO // El presidente de CECO, Antonio Díaz, entidad fundadora de Córdoba Ecuestre y que ocupa la presidencia, recordó también ayer que la asociación no es solo Rafael Blanco, sino «la suma de trece entidades, que manifestamos nuestro deseo de que Caballerizas Reales pueda culminar en manos de la ciudad

y visualizar el trabajo y la apuesta decidida que ha venido realizando en Caballerizas desde que entró en el 2010, haciendo realidad lo que hoy es». Díaz mostró el «empeño decidido» de esta entidad «para que Caballerizas, cuando finalice la negociación, sea para Córdoba Ecuestre», se pueda crear el Centro Internacional del Caballo y realizar otras actividades. En la misma línea se manifestó el representante de la Universidad de Córdoba, Librado Carrasco, quien trasladó la opinión del rector por la importancia de Córdoba Ecuestre para la UCO, el significado cultural e histórico y la oportunidad para alumnos de Veterinaria y Turismo que realizan prácticas en la asociación cordobesa, además de la faceta de formación de las jornadas de Cabalcor. Otro colectivo que apoya a Córdoba Ecuestre es el Consejo del Movimiento Ciudadano, como recordó ayer Blanco.

Por su parte, el presidente de Asaja, Ignacio Fernández de Mesa, valoró el trabajo de Córdoba Ecuestre, mostrándose «sorprendido» de los logros, así como del eco nacional e internacional que tiene la asociación, subrayando la importancia de las ganaderías y la preocupación por su futuro. Sería «una pérdida absurda y antihistórica», dijo. Fernández de Mesa exigió «que se entregue -Caballerizas- a Córdoba Ecuestre porque lo tiene archimerecido. Me da lo mismo que sea Defensa o el Ayuntamiento, pero que se apoye a Córdoba Ecuestre».

La misma contundencia mostraron el presidente de los Criadores de Caballos Españoles en Córdoba, Enrique Lovera; el recién elegido presidente del Club Hípico, Francisco Quesada; el del Club de Enganches, José Barranco; el de Carruajes de Tradición, Rafael Galán; el de Alcolea Ecuestre, Manuel Montijano; o el directivo de CECO, Vicente Serrano, quien destacó la labor de Córdoba Ecuestre en la economía y en la internacionalización «de nuestras empresas». El presidente de la Asociación Amigos del Raid, Juan Antonio Merlos, mostró su «honda preocupación» por las negociaciones, así como dudas sobre el futuro de Córdoba Ecuestre en caso de que se llegue a un acuerdo, por lo que pidió que la entidad tenga un sitio destacado.

Todos pidieron un acuerdo definitivo, porque «tenemos fuerza, estamos unidos y hemos demostrado nuestro trabajo», destacando la autogestión del edificio desde el año 2010, que se encontraron en un estado «deplorable» y en el que han invertido más de un millón de euros, «que ha salido de nuestro trabajo». «Nadie nos habla con claridad», lamentó Blanco, quien desde hace más de un año solicita por escrito, todos los meses, una entrevista con la alcaldesa, sin que hayan logrado aún reunirse con Ambrosio.