El presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo, Luis Martín, afirmó ayer que la normativa que obliga a los edificios de más de un siglo de antigüedad (y los protegidos y catalogados, así como el entorno) a superar la Inspección Técnica de Edificios afecta este año a alrededor de un millar de viviendas residenciales en Córdoba, que tendrían que realizar este trámite antes de que llegue el 2014.

De este modo, Martín señaló que el Consistorio mantendrá mañana una reunión con vecinos de la zona centro para informarles sobre este proceso y aclarar posibles dudas, y recordó que la convocatoria de ayudas, por la que los propietarios pueden percibir hasta 300 euros para la asistencia técnica del proyecto, "está abierta durante todo el año". En estos momentos el Ayuntamiento trabaja para mejorar los procesos informáticos y también realizará una campaña informativa para recordar a los propietarios que tienen que cumplir con esta obligación, que fue impulsada mediante un decreto estatal en el 2011 y dio lugar a una ordenanza municipal el año pasado (una última normativa, además, ha sumado al requisito de conservación, los de eficiencia energética y accesibilidad).

En esta línea, el presidente de la Gerencia de Urbanismo ha previsto que las primeras actuaciones que se desarrollarán en los residenciales centenarios serán estructurales y recordó que la norma "es clara" en cuanto a la competencia de los profesionales que pueden trabajar en estos informes. Así, apuntó que han mantenido contactos con los arquitectos y los aparejadores, y precisó que se han reunido con el Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales, a lo que añadió, en referencia a los honorarios de estos profesionales, que "consideramos que si se habla de una cantidad fija, eso da garantías de que las personas puedan abordar la inspección".