El Congreso Patios de Córdoba se clausuró ayer con una mesa en la que representantes de Vimcorsa, de la Junta de Andalucía y de la Asociación Claveles y Gitanillas debatieron intensamente sobre el boom turístico que rodea a la fiesta declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y la necesidad de mejorar la gestión para evitar que muera de éxito.

En este contexto, todos coincidieron en la necesidad de proteger adecuadamente las casas y el modo de vida que ha sido premiado por la Unesco, para lo cual reclamaron de forma unívoca que se realice un inventario de las casas patio más singulares de Córdoba. Según Victoria de Larriva, de Vimcorsa, «existen unas 3.100 casas patio en Córdoba de las cuales solo 80 cumplen las condiciones de casa de vecinos que da lugar a la fiesta». En la mesa, se cuestionó el «intrusismo» de determinados establecimientos e instituciones que confunden a los visitantes mostrando sus patios como parte de la fiesta cuando no lo son, al tiempo que reclamaron más inversión y colaboración de las instituciones en la rehabilitación y protección específica de estas casas con el fin de propiciar además el relevo generacional en la fiesta.