Los seis hombres de una misma familia acusados de un delito de asesinato en grado de tentativa, tras supuestamente apuñalar numerosas veces a un joven en el barrio cordobés de Las Margaritas, porque había puesto unos comentarios en la red social Facebook, han aceptado penas de entre cinco años y nueve meses y tres años y seis meses de cárcel, así como órdenes de alejamiento durante unos diez años, tras reconocer la mayor parte de los hechos.

El juicio se ha celebrado en la Sección Tercera de la Audiencia de Córdoba y ha quedado visto para sentencia, tras el reconocimiento en parte de los hechos, con la aplicación de la atenuante de reparación del daño y en uno de los casos, el varón que ha aceptado la pena más alta, con la atenuante de estar afectado por el consumo de sustancias estupefacientes.

En este sentido, los acusados han llegado a un acuerdo económico con el perjudicado a través de sus representantes, con la inclusión de una indemnización de 56.000 euros, que ha sido abonada por los procesados.

Según recoge la calificación del Ministerio Público, que pedía inicialmente penas de 12 años de cárcel para cada uno, y a la que ha tenido acceso Europa Press, uno de los procesados y el afectado se enfrentaron por dichos comentarios, tras lo cual las relaciones entre ambos fueron "tensas", algo que este acusado puso en conocimiento de su entorno familiar, tomando la decisión él "de ir en busca del perjudicado con el fin de causarle la muerte en venganza por los comentarios".

LOS HECHOS

Así, según el fiscal, la noche del día 17 de diciembre del año 2016 los acusados fueron en busca de la víctima a la Avenida Luis Cañete de Córdoba, con navajas, cuchillos, pistolas y una escopeta. El joven al verlos trató de huir corriendo, pero cayó al suelo, momento en el que lo rodearon, impidiendo que se levantara y presuntamente comenzaron a darle puñaladas. Uno de los ya fallecidos apuntando con pistola evitaba que se acercaran otras personas para socorrer al perjudicado, avisando que daría un tiro a quien lo hiciera.

De este modo, los seis acusados "arremetieron" contra el joven, quien estaba en el suelo "sin posibilidad de defenderse, dándole puñaladas y animándose entre sí con la finalidad de quitarle la vida", según expone el Ministerio Público, que relata que se marcharon cuando creían que había muerto.

No obstante, el joven fue intervenido en Urgencias de las distintas lesiones en el Hospital Reina Sofía, que de no haber sido por la actuación "urgente" el desenlace de las heridas hubiera sido el fallecimiento, según asevera el fiscal, que relata que tardó en curarse 365 días, de los que dos estuvo "muy grave"; ocho, "grave", y el resto con calidad de vida "moderada", precisando de tratamiento y una segunda intervención. Le han quedado diversas secuelas.