La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba ha condenado a un año y ocho meses de prisión, y a una multa de 1.440 euros a una mujer acusada de apoderarse de una colección de objetos de artistas que decoraba un conocido bar del que fue socia en la ciudad de Córdoba.

En este sentido, el tribunal ha establecido que la procesada deberá devolver los efectos a su propietario (un director artístico que fue socio del negocio) y que si no lo hace tendrá que indemnizarle en 151.350 euros, que es la cuantía en la que fue tasada pericialmente la colección.

En la sentencia, facilitada a este periódico por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, se considera a la encausada autora de un delito de apropiación indebida en el que concurre el subtipo agravado de especial gravedad por el valor de los efectos, además de la atenuante de dilaciones indebidas.

El documento recoge que la condenada aprovechó su condición de administradora de la sociedad para recibir la colección privada de objetos que le entregó el arrendatario del negocio y que la trasladó a su domicilio en La Coruña. Entre otros, esta contenía una docena de guitarras de artistas como Andrés Calamaro, Carlos Santana, Julieta Venegas y Nacho García Vega, así como 16 discos de oro o de platino que habían cedido distintos grupos, una chaqueta y una pintura de Joaquín Sabina, y una pintura original de Manolo García.