El hospital Universitario Reina Sofía finaliza la reforma integral de la unidad de diagnóstico de cáncer de mama que se ubica en el Hospital Provincial. Después de tres meses de obras, esta unidad ha transformado su aspecto y su dotación de equipos con el objetivo de incrementar el confort de profesionales y pacientes por un lado, y de seguir incorporando la última tecnología disponible por otro, para ofrecer a las pacientes los beneficios que los nuevos equipos aportan en el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad.

Concretamente el hospital ha renovado todo el equipamiento, incorporando dos equipos de mamografía digital con tomosíntesis que permiten también realizar mamografía con contraste, un equipo de biopsia asistida por imagen 2D y 3D con mesa prona y cuatro estaciones de trabajo. Según destaca la responsable de la Unidad de Radiodiagnóstico y Cáncer de Mama, Marina Álvarez, “con las últimas incorporaciones tecnológicas, la unidad da un salto cualitativo importante, que tendrá un impacto en el diagnóstico y manejo de la patología mamaria en nuestro centro y que beneficiará a muchas pacientes”. Además de estos equipos, la unidad cuenta con ecógrafos de alta gama, diferentes sistemas de biopsia mamaria y utiliza la resonancia de forma compartida con el resto de secciones de la unidad.

Esta dotación tecnológica viene a dar respuesta al elevado volumen de actividad que esta unidad registra anualmente. Solo durante el pasado año se realizaron más de 33.000 pruebas de imagen de mama, 1.650 biopsias mamarias y se diagnosticaron unos 480 carcinomas de mama.

Mejoras tecnológicas

La incorporación de estos equipos permite numerosas ventajas y mejoras para el diagnóstico y tratamiento de las pacientes. Concretamente, los equipos de mamografía ofrecen imagen digital de alta calidad, en 2D y 3D. Esta característica implica obtener en una sola exposición múltiples imágenes de la mama (de 1 mm de grosor), lo que facilita la visualización y caracterización de lesiones, así como el diagnóstico de las más pequeñas y sutiles, evitando con ello la necesidad de realizar otras pruebas complementarias.

Además, según explica Marina Álvarez, “otra de las características es que nos permite hacer mamografía con contraste intravenoso, una prueba que estudia otros aspectos funcionales del tumor, no valorados por la mamografía convencional, y ampliando por tanto la capacidad para detectar lesiones, así como para valorar mejor la extensión y las características de las mismas”. Aparte de la calidad de la imagen, los mamógrafos aportan mayor rapidez y disponen de pantallas de alta definición en las salas de exploración, lo que facilita la realización de procedimientos intervencionistas guiados por la imagen.

El otro dispositivo instalado en la unidad es el que realiza la biopsia mamaria asistida por vacío con mesa prona, que puede trabajar a partir de imagen 2D o de imagen 3D. Este equipo presenta la ventaja de que permite realizar la biopsia con precisión de cualquier lesión mamaria, de forma rápida y con gran comodidad para la paciente, a quien se le realiza la prueba desde una posición tumbada boca abajo sin tener que visualizar el procedimiento (punción), siendo por tanto un momento menos agresivo y estresante para la paciente. Este equipo se utiliza de forma compartida por profesionales del área norte o área sur para la atención de pacientes de sus respectivas áreas que necesitan este procedimiento.

También se han renovado las estaciones de trabajo o monitores en los que los radiólogos valoran los estudios, dado que el área de imagen mamaria necesita monitores de alta resolución y definición para valorar las posibles lesiones. Estos monitores son una herramienta básica para los profesionales ya que “los métodos de imagen juegan un papel importante en el diagnóstico del cáncer de mama, en la elección y planificación del tratamiento adecuado, en la valoración de la eficacia de los mismos o en el seguimiento de pacientes y, de este modo, el diagnóstico de lesiones pequeñas y sutiles es clave para mejorar el pronóstico en esta patología, así como permitir tratamientos menos agresivos”, señala la responsable del servicio.

Las últimas innovaciones introducidas, junto con la adquisición reciente de ecógrafos específicos de mama y un nuevo equipo de resonancia magnética, sitúan a esta unidad a la vanguardia en dotación tecnológica y, dado su volumen de actividad, su integración con el programa de detección precoz de cáncer de mama y su coordinación provincial se beneficiará a un importante número de mujeres.

Reforma

Además de la incorporación de nuevo equipamiento, la Unidad de Mama ha experimentado una reforma integral de sus instalaciones, permitiendo incorporar parámetros que fomentan la humanización de la asistencia.

En este sentido, se han realizado obras relacionadas con el confort como la climatización, mobiliario, iluminación y decoración de espacios utilizando colores que reducen el estrés de las pacientes que tienen que someterse a las pruebas y ayudando a generar circuitos más funcionales y que aportan mayor intimidad. Todo ello respetando elementos de valor arquitectónico como es el techo característico de esta zona del Hospital Provincial.

Unidad de mama

La unidad dispone de una cartera de servicios muy completa y realiza todas las pruebas de imagen de mama de pacientes con sospecha de patología mamaria derivadas desde atención primaria o atención especializada, seguimiento de pacientes intervenidas o con riesgo incrementado para cáncer de mama o pacientes derivadas de la unidad de detección precoz de cáncer de mama para pruebas complementarias.

Para ello cuenta con profesionales muy cualificados en el área del diagnóstico de imagen de mama: radiólogos, técnicos especialistas y enfermería, con una amplia experiencia que prestan una dedicación específica a esta área.

Por otro lado, los profesionales de la unidad de mama planifican la actividad del programa de detección precoz, realizan la lectura de las mamografías de cribado, coordinan la derivación de pacientes a la unidad de referencia, y realizan las pruebas complementarias en aquellas mujeres que después de realizar la mamografía de cribado necesitan completar el estudio. Esta forma de trabajo garantiza que el programa de detección precoz de cáncer de mama alcance los niveles de calidad y resultados esperados.

La unidad tiene un alcance provincial, y se coordina con los profesionales de Área Norte y Área Sur de Córdoba, manteniendo protocolos de actuación comunes en la provincia y utilizando el equipamiento de esta unidad para cualquier mujer de la provincia que necesite un procedimiento no disponible en su área.

En cuanto a la ubicación, este servicio se sitúa en la planta baja del hospital Provincial desde el año 2002, junto al resto de especialidades que se dedican a la patología mamaria, como Cirugía General, Cirugía Plástica y Oncología Médica o Radioterápica, facilitando así la coordinación necesaria de todos los profesionales y la continuidad en la atención de pacientes.