El Ayuntamiento aprobará en su próximo pleno, que se celebrará el martes próximo, la creación de «una comisión de seguimiento de auditoría de la deuda municipal», que así es como se va a denominar el nuevo grupo de trabajo que nace ahora y que acabará su tarea en diciembre del 2018. Esa comisión auditará la deuda de más de 239 millones que posee el Ayuntamiento en estos momentos, aunque el periodo de análisis se limitará al que va del año 2005 al 2015, en el que se centrará en tres grandes momentos de endeudamiento, el 2005, año en el que se contrajo una deuda por 52 millones; 2010, por 152 millones; y 2013-2014, por 97 millones más. Según consta en el expediente abordado ayer en la comisión de Hacienda, el objetivo es identificar las políticas municipales que han podido tener «un impacto negativo sobre la ciudadanía».

La comisión estará integrada por un representante de cada grupo municipal, por las titulares de Intervención y Tesorería, dos miembros del Consejo Social, cinco del Consejo del Movimiento Ciudadano y tres especialistas independientes (uno de la UCO y dos de colectivos sociales). La comisión analizará el presupuesto y su ejecución, la contratación financiada con endeudamiento, los intereses de demora pendientes de pago, facturas, la situación patrimonial y las subvenciones, incentivos o fondos. Con esta comisión, el Ayuntamiento pretende lograr «conclusiones que eviten la repetición futura de malas prácticas detectadas».

La responsable de Hacienda, Alba Doblas, ha explicado que la idea es ver «si se ha hecho buen uso de la deuda municipal, del dinero que ha entrado en el Ayuntamiento a través del crédito» y «ver que no se ha malgastado». Ese buen uso no se centra en lo económico solo, sino que aborda el «impacto que ha tenido en la ciudad» a distintos niveles.

Los grupos municipales del PP, Ciudadanos y Ucor se abstuvieron en relación a esta propuesta, que, en cambio, fue aplaudida por Ganemos, que considera fundamental este análisis, incluido en su programa electoral, en el pacto de investidura y en el acuerdo con el cogobierno para aprobar los presupuestos del 2016 y 2017. La concejala Mª Ángeles Aguilera espera que el análisis «sea útil para la ciudad» y asegura que no se centrará solo en la deuda «sino también en qué nos hemos gastado el dinero y qué impacto tienen cada una de esas inversiones en lo social, en la igualdad de género o en lo medioambiental».

Pocito/ El Ayuntamiento rechaza las alegaciones presentadas por el Cabildo contra la reclamación de la plaza del Pocito de la Fuensanta al considerar que están fuera de plazo, ya que tienen registro de entrada del 3 de julio a pesar de que están enviadas desde junio, según el cronograma abordado ayer en la comisión. El Cabildo rebate en esas alegaciones los documentos municipales afirmando que no se puede determinar la posición exacta del camino vecinal que pasaba delante del santuario, que el espacio libre es privado pero de uso público, y que la declaración BIC reconoce que esa zona libre pertenece al Cabildo.