El comercio pide entrar en la gestión turística y vuelve a la mesa de veladores

Después de todo un mandato en el que tanto el edil de Izquierda Unida como el presidente de los comerciantes se han criticado públicamente con dureza, a cuenta de la política de Urbanismo sobre los veladores, ayer ambos representantes reconocieron que nunca debieron cruzar «ciertas líneas» y que no favorecía a ninguna de las dos entidades que representan, ni tampoco a la ciudad, un enfrentamiento como el que han tenido.

«No me duelen prendas en reconocerlo y le agradezco a Rafa (Bados) la capacidad de volver al diálogo que ha tenido», afirmó ayer Pedro García, mientras que el presidente de Comercio Córdoba le respondió reconociendo que el de ayer fue un día «importante», tras lamentar el enfrentamiento público vivido entre ambos y que «en algunos momentos ha sido muy duro, saltándose fronteras que nunca debíamos haber saltado».

En cuanto a las cuestiones de índole más práctico, Pedro García afirmó que a su juicio es fundamental que el comercio esté dentro de la estrategia de ciudad y de la gestión turística, por lo que se integrará en una comisión para luchar contra la contaminación visual del casco, una cuestión sobre la que la Unesco ha hecho ya alguna advertencia a las ciudades Patrimonio de la Humanidad, incluida Córdoba.

Sin embargo, el también teniente de alcalde de Turismo incidió en que en esta materia el comercio solo es una parte, quizá la menor, ya que la contaminación visual afecta a todo tipo de establecimientos, como bancos, bares y restaurantes.

Otra de las cuestiones clave anunciada ayer es que la Federación de Comercio, Comercio Córdoba, vuelve a la mesa de veladores (se salió en octubre del 2016), donde «hemos avanzado muchísimo», afirmó Pedro García, quien también comentó que se hará «una importante acción con el comercio en FITUR», si bien no se ha concretado aún cuál será.

Rafael Bados, por su parte, valoró de forma positiva haber normalizado las relaciones entre la federación de comerciantes y el Ayuntamiento, porque «no beneficiaba en nada al sector ni a las instituciones», dijo. El presidente de Comercio Córdoba destacó la importancia del comercio de cercanía en Córdoba, ya que es un sector en el que trabajan 40.000 personas, lo que supone un tercio de la economía local. En esta línea, Bados reivindicó la presencia del comercio en la gestión de la oferta turística de la ciudad y en la mesa de veladores. Sobre la comisión para la contaminación visual, quiso dejar claro que es importante no poner el foco sólo en el comercio, porque «hay sectores que contaminan bastante más», dijo, en el entorno protegido.

LAS POLÉMICAS

UN MANDATO DE ENFRENTAMIENTOS

LOS TRES CONFLICTOS

Los enfrentamientos entre Comercio Córdoba y el primer teniente de alcalde, Pedro García, han sido mutuos, se han producido a lo largo de casi todo el mandato y han girado sobre todo en torno al ordenamiento de veladores, la gestión del turismo y a la implantación de nuevas zonas comerciales. La ofensiva de Urbanismo para ordenar la presencia de mesas en la vía pública generó tensión entre los comerciantes (que fueron invitados pese a no tener veladores) y los hosteleros, que en octubre del 2016 se salieron de la mesa de veladores. Estos últimos regresaron -después de un monumental follón que dibujó un nuevo mapa de asociaciones hosteleras- , pero los comerciantes, no. Volvieron a saltar chispas en 2017 con la intención de García de eliminar la contaminación visual del casco, que el sector se tomó como algo personal. Cabe recordar que Bados presidía, además de Comercio Córdoba, el clúster Fides de turismo, desde el que también se enfrentó a García. Quizá el enfrentamiento más ‘comprensible’ haya sido el de las nuevas superficies comerciales. La última vez ha sido a cuenta del nuevo parque comercial, previsto por el PGOU, que se construirá en la carretera de Palma.