La Asociación de Directores de Educación Infantil, Primaria y Residencias Escolares de Andalucía (Asadipre) ha hecho público hoy un comunicado, al que se han adherido los 159 centros públicos de Córdoba que forman parte de la asociación, en el que advierten que no pueden "garantizar la vuelta a las aulas de forma presencial en un entorno escolar seguro en las actuales condiciones de espacios e infraestructuras con el personal del que disponen".

En el comunicado, aseguran que si no se atienden una serie de cuestiones imprescindibles no se podrá abrir los centros para la atención al público el 1 de septiembre y dejan en manos de las administraciones la responsabilidad si no toman las medidas para garantizar que los niños vuelvan a las aulas sin riesgo para la salud y la vida de trabajadores, alumnos y comunidad educativa.

Entre las cuestiones imprescindibles para la reapertura de los centros precisan de un plan reforzado de limpieza y desinfección a cargo de los ayuntamientos, "que deben certificar los protocolos de limpieza antes de que llegue el alumnado el 1 de septiembre". Para eso, proponen que la Consejería de Educación llegue a un acuerdo con los ayuntamientos para redactar protocolos conjuntos de la desinfección diaria en horario de mañana y tarde. Para elaborar los planes de apertura, los centros exigen como condición imprescindible "que la realización de los protocolos recaiga sobre personal o empresas expertas en protocolos sanitarios o, en su defecto, que el protocolo de cada centro reciba un visado de idoneidad de la Inspección Educativa o de la unidad de Prevención de Riesgos Laborales que esté listo antes de que se informe a las familias y se apruebe por las direcciones escolares.

Entre sus exigencias, plantean que las delegaciones deben tener hecha la planificación para la adquisición y reparto con antelación del material sanitario (mascarillas, termómetros, hidroalcohol...) necesario para prevenir los contagios y la transmisión del virus y que debe llegar a los centros antes del 1 de septiembre.

Distancia de seguridad y grupos de convivencia

Recuerdan desde Asadipre que la mayoría de los centros, al no haberse reducido la ratio ni contratado más profesorado para realizar agrupamientos más pequeños no podrán garantizar las distancias de seguridad que establecen las autoridades sanitarias , lo que implicaría en caso de apertura "que todo el alumnado de Infantil y Primaria y el personal del centro tengan que funcionar con la mascarilla toda la jornada". En su opinión, aunque podamos mantener abiertas las ventanas y puertas de las aulas y pasillos, "no podemos obviar que se trata de recintos donde en pocos metros cuadrados se encuentran 26, 27 y hasta 28 personas dentro de una sala, y en un edificio que en su mayoría presenta una presencialidad de centenares de personas diarias durante toda la mañana". Señalan por tanto que "hablar de grupos de convivencia en un centro educativo, manteniendo los recursos existentes en la actualidad, supone desconocer completamente la realidad de los colegios andaluces, tratándose de una solución episódica y para la mayoría de los centros imposible de llevar a cabo".

Material informático

Los directores de los centros entienden también que "después de seis meses desde el inicio de la pandemia, ha de estar prevista la dotación inmediata de equipamiento informático no sólo al profesorado, sino para muchas de las familias del alumnado que carecen de equipos informáticos, conexiones a internet y habilidades específicas para el teleaprendizaje", por si fuera necesario volver al teletrabajo.

Señalan que si ya en cualquier curso los equipos directivos tienen dificultad para organizar los centros debido a la movilidad y a la falta de profesorado al inicio de curso, en la situación actual "nos encontramos que se agrava aún más ya que a día de hoy desconocemos el número de profesores que dispondremos en el curso 20/21" por lo que demandan a la Consejería "que antes de la colocación definitiva de efectivos, doten las plantillas de funcionamiento del número de profesores que van a disponer el próximo curso porque esa sería la única manera de asegurar que el profesorado llegue a los centros el 1 de septiembre".

En cuanto a Infantil, piden que la escolarización sea flexible y se autorice a las familias que lo prefieran que sus hijos no asistan a clase mientras dure la pandemia, por la especial dificultad para cumplir con los requisitos. "Las direcciones debemos asegurarles que la falta será justificada y su plaza no será ocupada por otro niño", destacan.