La empresa municipal de cementerios ha logrado cerrar por tercer año consecutivo con beneficios. En concreto, el ejercicio del 2018 ha concluido con un saldo positivo de 125.638 euros, algo inferior al del pasado año. En el informe del gerente de Cecosam, José Antonio Romero (a la postre número 6 en la lista de Isabel Ambrosio a las municipales), que irá al consejo de administración de la empresa esta semana, se explica que el saldo viene dado por el aumento de ingresos en casi todos los conceptos, sobre todo renovaciones y adjudicaciones, inhumaciones y horno, adquisición de columbarios y nichos a 75 años. Los ingresos de explotación han sido de 1,75 millones de euros (los ingresos del presupuesto consolidado ascienden a 2,8 millones), mientras que los gastos (2,7 millones en el consolidado, de los que la partida más importante es para personal, el 71,15%) han bajado respecto a lo previsto, pese al incremento de las nóminas de los trabajadores en un 1,5% hasta junio, y un 1,75%, hasta diciembre.

En el informe de gestión se advierte de que cada vez es «menor el interés que generan» los servicios de cementerios, una actividad de obligado cumplimiento por parte de los municipios. Basta aportar el porcentaje que suponían las inhumaciones en 1999 respecto a otras modalidades de enterramiento, un 79,9%, frente al 38,08% del 2018. En esos 17 años se han perdido un 41,89% de los servicios propios del cementerio, según el informe, que achaca la situación a la subida de cremaciones, regidas por las leyes del mercado. «La consecuencia es que las cifras de negocio de las compañías privadas van subiendo año tras año, mientras que la de los cementerios públicos baja cada año al contar con una menor actividad». El documento asegura que el futuro de los cementerios es «incierto» y recomienda «afianzar los servicios de tanatorio y como consecuencia de horno». En el capítulo de ingresos, los más relevantes son los de las inhumaciones (724.277 euros, suponen el 41,27%), seguidas de las adjudicaciones (548.648 euros, 31,2%), el horno (186.761 euros, 106%) y el tanatorio (161.683, 9,21%).

En 2018, en Córdoba fallecieron 2.799 personas. Cecosam ha realizado 1.072 inhumaciones, un 7,94% menos que en 2017 (por quinto año se sitúan por debajo de los 1.200 servicios y suponen un 38,3%). Las cremaciones supusieron el 61,7% (0,29% menos que en 2017). La actividad del tanatorio ha bajado debido a que la Junta dejó de contratar a Cecosam 43 salas anuales destinadas a atender a familias con un difunto en el Anatómico Forense, ya que se han trasladado a la Ciudad de la Justicia. El uso medio de las salas de velatorio ha sido solo del 26,52% y durante 101 días no tuvieron actividad ninguna.