Nada menos que 56 contratos de suministros de materiales y servicios autorizó ayer la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Córdoba por prestaciones de pequeña cuantía de todo tipo que, sin embargo, en conjunto supuso 595.584 euros. Casi 600.000 euros que se suman a lo que genera directamente la administración local en la economía cordobesa a través de proveedores de todo tipo, aunque por otra parte tampoco falten problemas, por ejemplo, con las quejas por el retraso de los pagos.

En todo caso, el Ayuntamiento ha ahorrado entre estos 56 contratos unos 49.000 euros sobre las cantidades previstas inicialmente, según informó ayer la teniente de alcalde delegada de Hacienda, Alba Doblas, tras la Junta de Gobierno Local.

La Junta de Gobierno Local también dio ayer un impulso, al menos burocrático, a la parálisis de las obras para recuperar el antiguo convento Regina, aprobándose el expediente para rescindir el contrato a la empresa a la que se le había adjudicado y que, según el Ayuntamiento, ha incumplido las condiciones de la licitación y ni siquiera ha empezado los trabajos. Ahora quedan 10 días de plazo para las alegaciones y después irá al consejo Consultivo que, según confía Doblas, resolverá «a finales de agosto». La idea es comenzar en otoño a readjudicar la obra.

La intervención que sí tiene un comienzo inmediato (aunque también es cierto que así se va anunciando desde septiembre del pasado año) es la de 338.000 euros de la segunda fase de la puesta en valor del Templo Romano, después de que se haya firmado el acta de replanteo y, ayer, se aprobara el preceptivo plan de seguridad y salud de la obra: el último trámite. Confían en que la obra, que corre prisa porque puede quedarse sin financiación, comience al fin el próximo lunes.