La vivienda de protección oficial (VPO) sigue siendo un bien escaso tal y como se constata año tras año. Si se cruzan los datos que publica la Junta del registro de demandantes, actualizados a enero del 2021, y los recabados por el portal obranuevaencordoba.es, que dirige Juan Manuel Gómez, se observa cómo casi 5.000 familias (4.734) aguardan una VPO pero hay menos de medio centenar disponibles a día de hoy. En realidad hay varias promociones de VPO en comercialización, que suman 726 viviendas, pero de ellas se ha vendido ya el 90% y "solo habría unas 80 disponibles", según indica Gómez, de los proyectos que tienen en el mercado Convisur y la empresa municipal Vimcorsa. A estas se unirán pronto cerca de 300 que pondrán a la venta Vimpyca (78), Monthisa (88) y Vimcorsa (100) en Huerta de Santa Isabel. La VPO promovida representa solo el 22% de la vivienda que está en comercialización (3.278, de las que el 78%, 2.552, son de régimen libre).
Esa escasez de VPO va a variar poco en los próximos meses a tenor de los proyectos autorizados por el Colegio de Arquitectos de Córdoba en el 2020, que reflejan lo que se va a construir, 354 VPO en la capital. Vimcorsa tiene en ejecución dos bloques en Huerta de Santa Isabel y este año comenzará a edificar el tercero, que es el que comercializará a partir de marzo. Entre los tres suman 308 VPO que entregará entre el 2022 y 2023. Al margen de estas obras y de que se deshará de las siete VPO de promociones anteriores que tiene en stock, no se sabe más de sus planes de futuro, más allá de que habilitará una veintena de alojamientos de alquiler social en la antigua escuela Félix Hernández y de que mantiene la idea de levantar otro bloque de apartamentos en Sama Naharro cuando logre financiación.
Las cifras varían poco año tras año en el registro de demandantes. La demanda se mueve, la oferta también, pero la primera siempre supera a la segunda. Hace un año había 5.275 familias en lista de espera, 541 más que ahora, y un centenar de VPO disponibles. Para las adjudicaciones solo cuentan las inscripciones activas en el registro, las que tienen actualizada la documentación. Así, la Junta contabiliza 21.453 solicitudes, de las que 19.446 están inscritas, pero de ellas hay 12.048 caducadas (porque los demandantes se cansan o sus circunstancias cambian) y 2.664 canceladas por haber logrado vivienda. En el último año 524 familias han conseguido una VPO (la década pasada, 2.140).
El perfil del demandante varía poco también. El alquiler con opción a compra y el normal, que apenas se promueven, son las opciones favoritas del 67% de los inscritos, por lo que solo un tercio quieren comprar, aunque hay quien pide todo. Por edades, el tramo de entre 35 y 50 años, que representa el 50%, y el de menores de 35 (un 30%) acapara la demanda. En cuanto al nivel económico, casi el 70% ganan menos que 1,5 veces el Iprem (menos de 850 euros al mes). La mayoría de los que aguardan piso son familias monoparentales.
El secretario general de Construcor, Francisco Carmona, señala que la compraventa de VPO ha caído un 19% en un año por "la ralentización de la puesta en marcha de nuevos proyectos a la espera de la aprobación del nuevo plan andaluz de vivienda, y el hecho de que la mayor parte de los demandantes inscritos en los registros" no disponen "de los niveles de solvencia requeridos por las entidades de crédito para acceder al régimen de compra". A su juicio, la solución pasa "bien por el mercado de la vivienda usada, bien por el diseño de un plan integral de las administraciones públicas para acceder a las ayudas previstas en el plan estatal dirigidas a impulsar la viviendas en alquiler".
El 66% de los inmuebles que están en el mercado consiguen venderse
El 2020 no fue malo ni en cantidad de inmuebles ofertados (casi igual que en el 2019) ni en porcentaje de ventas (hubo más aún que un año antes), según refleja el balance ofrecido por obranuevaencordoba.es. De las 74 promociones con 3.418 viviendas de todo tipo en el mercado, se vendieron el 66% y al cerrar el ejercicio quedaban 1.153 disponibles. En el caso de la vivienda libre, el porcentaje de venta de las 2.530 que había fue del 60% (quedaron 1.153) y el de las 888 VPO, del 84% (restaron 140 y parte de ellas se han vendido).
A juicio del consultor inmobiliario Juan Manuel Gómez, durante el año del covid, "la obra nueva en Córdoba ha salvado los muebles". Según indica, "estábamos en una caída de ventas en el segundo semestre del 2019 y vino la pandemia a ponerlo todo patas arriba". A pesar de que "las ventas se resintieron en el confinamiento", añade, el interés por la vivienda nueva aumentó. Una circunstancia que ha percibido es que la crisis "ha eliminado promociones que estaban en precios fuera de mercado". En el 2020 se dieron de baja 1.016 viviendas, la mayoría, al estar vendidas, aunque algunas salieron del mercado por la crisis.
Gómez constata que "sigue existiendo poca oferta" de vivienda protegida a pesar de que este año se ha iniciado la comercialización de dos promociones de Vimcorsa y Vimpyca con 278 viviendas. Según indica, Convisur y Vimpyca son las empresas que "tiran del carro" de la VPO. En los años pasados, a ambas se sumaron cooperativas, "pero ya no hay tanto suelo disponible". Aunque en Huerta de Santa Isabel aún queda mucho terreno libre, los expertos ya están viendo la necesidad de urbanizar nuevos barrios. Los dos que llegarán antes a esa fase son los de Ciudad Jardín de Poniente 2 y 3.
Vimcorsa planea proyectos para jóvenes y mayores
La empresa municipal Vimcorsa tiene en mente ejecutar viviendas para jóvenes y mayores en régimen de alquiler. Esa es, al menos, la intención de su presidente, Salvador Fuentes, que asegura que los proyectos de la empresa no se quedarán solo en las 308 VPO de Huerta de Santa Isabel Este. "Se seguirá haciendo VPO pero más enfocada a personas mayores y jóvenes y se hará un estudio de necesidades por distritos", asegura Fuentes. El responsable de Vimcorsa afirma que el suelo no será un problema, ya que Urbanismo dispone de terrenos en los que la empresa municipal podrá construir VPO.
La edificación de un nuevo bloque de apartamentos en Sama Naharro, donde ya hay uno ocupado por mayores en régimen de alquiler, que se sufragaría con remanentes, financiación bancaria y ayudas, está entre sus objetivos, al igual que promover otros edificios para jóvenes, con apartamentos pequeños y zonas comunes.
