El informe elaborado por el Imtur e investigadores de la UCO también divide la tipología de turistas en una novedosa clasificación compuesta por cuatro grandes perfiles: el turista patrimonial, que sería el 38,1% de los que visitan la ciudad; el cultural, el 29,1%; el emocional, el 19,8%; y el alternativo, el 13% restante; dependiendo de su interés por el patrimonio y de la experiencia emocional «profunda o superficial» que tiene, relacionada con «las sensaciones, con los sentimientos, la idea de percepción emocional del turista, y con el buen sabor de boca que le deja la visita», como explicó Tomás López-Guzmán, investigador de la UCO. Esta clasificación está basada en modelos teóricos de segmentación de viajeros en lugares que son Patrimonio de la Humanidad, como Córdoba, sobre los cuales los investigadores de la UCO han diseñado un modelo propio. Los patrimoniales y emocionales son los que realizan un mayor gasto diario.