Cáritas Diocesana de Córdoba y el grupo hostelero Cabezas Romero firmaron ayer la renovación del acuerdo de colaboración entre ambas organizaciones, rubricado en abril del 2015, mediante el cual se ha conseguido recoger un total de 26.700 kilos de aceite usado, obtenidos de los cuatro establecimientos del grupo: Casa Pepe de la Judería, Casa Rubio, Caravasar y Taberna el Nº10. Esta cantidad equivale la obtención de más de 14.000 euros de beneficios, que han sido destinados íntegramente a Cáritas para sus proyectos sociales.

La presidenta de Cáritas Córdoba, María Dolores Vallecillo, destacó ayer la colaboración de esta empresa, ya que «si no fuera porque contamos con instituciones y empresas que nos apoyan y colaboran con nosotros, no podríamos hacer nada de esto», incidiendo en que Cáritas «sigue así ayudando a los marginados y más desfavorecidos».

La recogida del aceite usado se realiza gracias a la colaboración «altruista» de Ecoil -que colabora con Solemcor, empresa de inserción laboral de Cáritas-, cuyo gerente, Iván Barbero, explicó ayer que esta empresa es la encargada de «poner los recursos humanos y mecánicos para realizar esta labor», y así «tratar el aceite para convertirlo en biocarburante», obteniendo beneficios de su venta para la organización humanitaria.

inserción sociolaboral / Por otro lado, el presidente del grupo Cabezas Romero, Miguel Cabezas, quiso destacar la política de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de la empresa de hostelería, que colabora con Solemcor desde el 2015 para insertar en el mundo laboral a las personas en riesgo de exclusión. De este modo, desde la firma del convenio de colaboración con Cáritas hace dos años, el grupo ha efectuado ocho contratos en prácticas, tanto en cocina como en sala, además de las dos incorporaciones que se esperan esta semana, en virtud del convenio firmado ayer. Así, María Dolores Vallecillo expresó que «todo el mundo tiene derecho a un empleo y a vivir dignamente gracias a su esfuerzo y no solo de la caridad».

La colaboración entre Cáritas y Cabezas Romero también comprende aspectos formativos, entre los que destaca la formación de los alumnos de la Escuela Restaurante Tabgha, además del taller de cocina de las abuelas en el Club Figueroa, donde todo lo recaudado se destina a Cáritas Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción.