El Concilio Vaticano II y su legado hasta la Amoris Laetitia, la exhortación post-sinodial del Papa Francisco, llevó ayer al cardenal Antonio María Rouco Varela a reivindicar en Córdoba, entre otros puntos, la «coherencia» de las raíces cristianas de la familia en el ámbito de la sociedad europea, todo ello en una profunda reflexión donde unió Teología, Derecho Canónico e Internacional, Historia y Filosofía.

El cardenal hizo estas consideraciones a lo largo de la conferencia Matrimonio y Familia en el Concilio Vaticano II. 50 años después, que ofreció ayer en el Obispado de Córdoba y con la que se abría la 22ª Semana de la Familia. Más aún, el acto formó parte de una jornada maratoniana en la que Rouco Varela, a sus 80 años, ya ofrecía por la mañana una clase magistral en la Escuela de Magisterio, haciendo valer sus conocimientos y experiencia como profesor universitario desde su primer doctorado (hace 52 años) con una tesis sobre las relaciones Iglesia-Estado.

El cardenal, que durante cuatro mandatos y en dos periodos distintos presidió la Conferencia Episcopal Española, reiteró anoche sus posturas sobre cuestiones sociales (algunas de ellas, como el aborto, le han encuadrado en un sector conservador de la Iglesia), razonándolas desde puntos históricos y teológicos.

La 22ª Semana de la Familia, que ayer inauguró con su conferencia el cardenal Rouco Varela, tendrá continuidad hoy con la disertación del obispo auxiliar de Sevilla, Santiago Gómez Sierra, que hablará también en el salón de actos del Obispado, a las 20.00 horas, sobre La alianza educativa: familia, colegio y parroquia. Mañana y el jueves, en el mismo lugar y hora, también podrá escucharse al delegado diocesano de familia y vida de la Archidiócesis de Toledo, Miguel Garrigos, y a la doctora en Filosofía del Deteho y profesora del Instituto Edith Stein de Granada Feliciana Merino, estando previsto clausurar la Semana de la Familia con una vigilia de oración por la defensa de la vida en el seminario mayor San Pelagio, presidida por el obispo de Córdoba.