"Si no tienes piso en propiedad, no eres nadie". Esa es la idea con la que los españoles fuimos bombardeados durante los años de la burbuja inmobiliaria para convencernos de la necesidad de estar hipotecados. Una mentira mil veces repetida que acabó por venderse como verdad irrefutable y que a día de hoy ha explotado en la cara a miles de familias. Ante la evidencia de la 'estafa' bancaria, solo queda abrir los ojos y pelear. Y que caiga quien tenga que caer.