El candidato a la Alcaldía de Córdoba, José María Bellido, fue recibido ayer al grito de «alcalde, alcalde» en la tradicional recepción que los populares ofrecen en su caseta en la Feria de Córdoba, donde se congratuló de su victoria en la capital, después de que muchos dieran al PP «por acabado». En un ambiente festivo y de camaradería, los populares celebraron ayer de nuevo la victoria con mayoría absoluta en once municipios de la provincia y relativa en dos más, uno de ellos la capital y otro La Rambla, donde el presidente del PP cordobés, Adolfo Molina, habló de «triunfo científicamente histórico», ya que es la primera vez que se produce el vuelco electoral en este municipio de la Campiña. Además de Bellido, allí estuvieron los vencedores de las elecciones en Cabra, Priego, Pozoblanco o Villanueva de Córdoba, entre otros.

Adolfo Molina saludó a todos y reconoció, en su breve intervención, que el PP lo ha pasado mal en los últimos dos meses, después, sobre todo, del descalabro electoral de las elecciones generales. Quizá, por eso, los resultados de estos comicios municipales le han sabido aún mejor. «El Partido Popular de Córdoba está más vivo que nunca, más unido que nunca y tiene más futuro por delante que nunca», afirmó el presidente del PP cordobés.

José María Bellido, por su parte, ahondó en esta reflexión asegurando que las del 26-M han sido las elecciones «más bonitas» que ha vivido, sobre todo por la remontada. «Hemos remontado cuando creían que este partido estaba acabado, pero hemos demostrado que hay partido y muchos cordobeses nos han dado su confianza», declaró. Asimismo, dijo que a partir de que acabe la Feria se dedicarán «a trabajar por los que nos han votado, a trabajar para no defraudarles y darles lo que les hemos prometido, para seguir teniendo su confianza durante muchos años».