BBVA encargó al excomisario Villarejo investigar a Rafael Gómez Sánchez con el fin de rastrear un posible patrimonio oculto del empresario cordobés, informa el hoy el digital El Confidencial. Según este portal, así figura en los trabajos que está llevando a cabo la Audiencia Nacional y que ha supuesto la imputación de los exdirectivos de la entidad bancaria Julio Corrochano, jefe de seguridad del banco, y Antonio Béjar, que, según El Confidencial, fue quien le encargó a Villarejo el trabajo.

Siempre según El Confidencial, BBVA quería averiguar si, "tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, el industrial había vaciado su promotora Grupo Arenal 2000 para evitar la devolución de créditos millonarios". Según explican las fuentes consultadas por El Confidencial, "Villarejo y sus colaboradores consiguieron descubrir activos que Rafael Gómez había ocultado a través de testaferros y empresas pantalla. BBVA recibió un informe con las conclusiones. La entidad quedó muy satisfecha con la operación. Los datos le sirvieron para reclamar bienes que el constructor andaluz había logrado poner fuera de su radar y, de ese modo, mejorar sus ratios de exposición al ladrillo en plena crisis financiera".