La Delegación de Salud contabilizó durante el 2017 un total de tres casos nuevos de sida, frente a los 6 nuevos que se registraron en el 2016, lo que supuso un descenso del 11%. A pesar de este dato positivo, la delegada de Salud de la Junta, María Ángeles Luna, ha hecho una llamada de atención, sobre todo a la población joven, y en especial a los hombres, ya que en esta franja de población es donde se están encontrando más nuevos casos.

Luna, durante la entrega de la 20 edición de los premios Pepe Espaliu que han recaído en la fundación Emet Arco Iris y en el médico de la prisión de Córdoba José de Juan, ha destacado que la tendencia a nuevos casos de sida sigue a la baja, como en los últimos años, Dichos galardones, que se entregan por los actos del día mundial de la lucha contra el sida, han recaído este año en la fundación Emet Arco iris y en José de Juan Ramírez, médico de instituciones penitenciarias en la prisión de Córdoba.

La delegada de Salud ha recordado que el preservativo no es sólo la mejor protección contra esta infección, sino que también evita embarazos no deseados y otras infecciones de transmisión sexual”.

En el 2017 se notificaron en Córdoba 33 nuevas infecciones por VIH (37 en 2016), lo que supone una tasa de incidencia de 4,19 casos por 100.000 habitantes, y un descenso respecto a 2016 en el que la tasa fue de 4,67 por 100.000 habitantes. De estos nuevos diagnósticos de VIH, el 87,88 % ocurrió en hombres y el 12,12 % en mujeres.

El responsable de epidemiología de la Delegación de Salud, Fernando García, ha precisado que la categoría de transmisión más frecuente fue la de hombres que tienen sexo con hombres (HSH), un 51,52 % del total, seguida de la transmisión heterosexual, un 21,21%, y de la que afecta a usuarios de drogas por vía intravenosa (UDI) un 3,03%.

En cuanto a la tasa de sida, en Córdoba se situó en el 2017 en 0,38 casos por 100.000 habitantes, inferior a la registrada en España (1,2 por 100.000 habitantes).

Luna ha precisado que si bien “el sida, hoy por hoy, no se cura, sí hemos conseguido que se convierta en una enfermedad crónica”. Por otro lado, en cuanto la infección por VIH, ha explicado que hemos logrado disminuir la morbimortalidad e incrementar la expectativa de los pacientes con esta infección, gracias al tratamiento antirretroviral, al igual que se ha mejorado notablemente la calidad de vida, que puede ser prácticamente normal para la mayoría de los pacientes.

Los premiados

En la entrega de galardones de esta edición, que ha tenido lugar en la delegación del Gobierno de la Junta en Córdoba, María Ángeles Luna ha señalado, con respecto a los galardonados, que son “un ejemplo de compromiso en la lucha frente a esta enfermedad”. Además, ha hecho hincapié en que, en materia de SIDA/VIH “seguimos teniendo un gran reto: las estrategias conjuntas y el esfuerzo entre administraciones, colectivos, asociaciones y ciudadanía como la principal condición para combatir esta enfermedad”.

La fundación Emet Arco Iris ha recibido el galardón por su trayectoria durante 35 años de vida en los que han atendido a más de 5.000 personas con adicciones, en numerosas ocasiones con la infección VIH, lo que los ha llevado a implicarse, colaborar en el ámbito sanitario, educativo, psicológico y social para dotar a sus usuarios de una mejor calidad de vida. A través de los centros educativos y de diversos colectivos, esta fundación comparte su experiencia especialmente con los más jóvenes y en concreto con los menores que atienden en sus centros. Además, actúa directamente con mujeres con problemas de adicción, intervienen con mujeres víctimas de violencia de género, mujeres inmersas en la prostitución o inmigrantes en riesgo de ser víctimas de trata de seres humanos y sus hijos. Una labor que le ha llevado al reconocimiento con este galardón.

Por otro lado, José de Juan Ramírez, ha visto reconocida su larga trayectoria profesional como médico en el ámbito penitenciario y su gran implicación en el control del VIH y otras ITS, así como en la curación de la infección por VHC. Cuenta con numerosas publicaciones sobre su trabajo en prisión para el control de VIH y VHC, y es ejemplo de la labor de los médicos de prisiones, tan desconocida y de tanta trascendencia para la población penitenciaria y que conlleva una importante labor en beneficio de la sociedad.