La cementera Cosmos no podrá instalar una incineradora de residuos en sus instalaciones. El presidente de la Gerencia de Urbanismo, Pedro García, anunció ayer el inicio inminente de "un estudio sobre la normativa urbanística y sectorial de aplicación a la actividad y al emplazamiento de la fábrica de cementos y materiales Cosmos" (antigua Asland) cuyas conclusiones está previsto que se eleven al Pleno el próximo mes de noviembre. Según explicó a este periódico el gerente de Urbanismo, Emilio García, dicho informe podría no solo impedir la incineración de residios sino declarar fuera de ordenación urbanística la cementera, lo que podría cuestionar la actividad que realiza actualmente.

García recordó que Cosmos cuenta con una autorización del 2015 para la instalación de una incineradora, actualizada por la Consejería de Medio Ambiente tras haberla declarado caducada previamente la Delegación Provincial de Medio Ambiente, pero no dispone de la licencia municipal para realizar la obra necesaria ni tampoco para la actividad de incineración. Este permiso, que el Ayuntamiento no contempla conceder, quedaría automáticamente desestimado si la fábrica fuera declarada fuera de ordenación. El término fuera de ordenación significa que sería contraria al PGOU y, por lo tanto, su actividad sería incompatible con la existencia de viviendas existentes en su entorno más cercano.

La iniciativa de Urbanismo, según Pedro García, responde a un compromiso programático del gobierno municipal con la plataforma Aire Limpio y pretende, por un lado, argumentar la negativa del Ayuntamiento a la instalación de la incineradora y, por otro, conocer si el uso actual de la fábrica es compatible con el PGOU. Declarar la fábrica fuera de ordenación no tendría que suponer el cierre de la misma ni la prohibición de realizar la actividad que lleva a cabo en estos momentos, pero sí se podría establecer un periodo transitorio para su extinción o imponer unas condiciones a la producción. En estos momentos, la fábrica utiliza combustibles como el coque de petróleo o el fuel para la fabricación de cemento, pero no incinera residuos.

Miembros de la plataforma Aire Limpio se mostraron ayer satisfechos por la iniciativa anunciada por el Ayuntamiento. Según Guillermo Contreras, uno de sus portavoces, "se trata simplemente de hacer cumplir lo que establece el PGOU", para lo cual "es necesario hacer una declaración expresa que hará imposible la incineración de residuos en las instalaciones". Ahora mismo, la zona donde se levanta la antigua Asland está calificada como industrial de grado 3, lo que "sería incluso incompatible con la fabricación de cemento, que debería hacerse en suelo industrial de grado 4", señala. De momento, Aire Limpio no exige que se desmantele la fábrica, para lo que habría que indemnizar a la cementera, pero sí impedir que el proyecto de incineradora sea posible.

Durante la campaña electoral, la alcaldesa, Isabel Ambrosio, se comprometió a realizar una moratoria para la concesión de la licencia a Cosmos, y evitar así la actividad de incineración, y también a modificar el PGOU "para facilitar el traslado de Cosmos a otra zona del municipio", una cuestión que seguiría pendiente con esta medida.