El Ayuntamiento tiene intención de encargar a la empresa pública Tragsa las finalización de las obras del centro de exposiciones, ferias y convenciones del Parque Joyero. De esa manera, ahorraría tiempo en el procedimiento para reanudar los trabajos que llevan casi dos años parados, ya que no tendría que sacarlos a concurso y Tragsa podría iniciarlos en el momento en el que esté redactado el proyecto de lo que queda de actuación. El teniente alcalde de Presidencia, Emilio Aumente, ha dado a conocer tras la junta de gobierno local los planes del Ayuntamiento una vez que el Ministerio de Hacienda ha autorizado a la Diputación a comprar una acción de Tragsa. Aumente explica que el permiso de Hacienda ha llegado esta misma mañana. La Diputación deberá aprobar en el próximo pleno la compra de la acción de Tragsa. El Ayuntamiento podrá acceder a los servicios de Tragsa a través del convenio que tiene firmado con la Diputación, que colabora económicamente en el proyecto.

La junta de gobierno local ha dado el visto bueno a la modificación del proyecto del centro de convenciones, paso necesario para reanudar las obras. Como publicó este periódico, el acuerdo de la junta de gobierno de hoy permite a los arquitectos autores del proyecto inicial, Fernando Suárez y Javier Terrados, modificar el mismo y continuar con la dirección de obra.

Aumente calcula que el proyecto puede estar en quince o veinte días. Ese documento determinará el coste real de lo que queda de obra. A partir de ese momento, el Ayuntamiento podrá negociar con Tragsa la reanudación de los trabajos. Aumente asegura que es “un alivio porque adelanta en tres o cuatro meses la adjudicación de la obra”, que “en cuatro o cinco meses” podría estar acabada, una vez que se reinicie. Aumente no ha concretado la fecha en la que comenzarán los trabajos. Además de ahorrar tiempo, la participación de Tragsa “garantiza que la empresa no nos dejará tirados”, asegura Aumente.

Tragsa es la empresa que ha intervenido en las obras del Palacio de Congresos de la calle Torrijos. La Junta recurrió a esta empresa para reanudar las obras que llevaban paradas desde el 2015. Tragsa inició los trabajos en el 2017 y los terminó en septiembre y será también la que se encargue de realizar la segunda fase.