Ciudadanos ha logrado que todos los grupos municipales del Pleno apoyen su moción sobre el problema del suministro de agua potable en las Jaras, que de manera recurrente se interrumpe afectando a las 300 familias que viven en esa urbanización de la capital cordobesa. El portavoz de Cs, David Dorado, ha mostrado su satisfacción por este consenso, pero ha indicado que estarán vigilantes para que se cumpla la moción antes de las elecciones municipales. "Si llega mayo sin que se haya cumplido esperamos ser nosotros desde el gobierno los que lo llevemos a cabo", ha indicado.

La moción del partido naranja insta al Ayuntamiento de Córdoba a que garantice el suministro de agua potable en esta urbanización, exigiendo que el suministro, tratamiento y vertido de agua se lleve a cabo por una empresa que cumpla con todos los requisitos legales y exigidos por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

El portavoz de Cs en el Ayuntamiento de Córdoba, David Dorado, criticó este problema arrastrado desde hace muchos años y al que ningún gobierno municipal ha hecho frente hasta ahora. Dorado ha recordado que las Jaras es una urbanización asentada en suelo urbano consolidado, por lo que el Ayuntamiento "tiene obligación de prestarle suministros". Asimismo advirtió de que la empresa privada que actualmente desarrolla este servicio "no tiene autorización administrativa para realizar los vertidos a la Cuenca del Guadalquivir", pese a lo cual el Ayuntamiento "mira para otro lado" desde hace años.

Juan Estévez, presidente de la asociación de vecinos de Las Jaras, ha intervenido en el pleno para recordar que el problema tiene más de 20 años, pero ha advertido que "la trampa de crear una comisión para dilatar el problema" no servirá de nada porque ellos estarán vigilantes. El representante vecinal ha criticado con firmeza la postura que ha mantenido hasta ahora el Ayuntamiento, a pesar de que estos vecinos pagan el IBI y están en suelo urbano legal, y ha criticado la postura de la Gerencia de Urbanismo, que ha mantenido hasta ahora que el abastecimiento del agua no dependía de ellos, echándole la pelota a Emacsa.