La concejala de Promoción de la Ciudad, Carmen González, ha achacado la situación excepcional de las casetas institucionales instaladas en la calle Guadalquivir del recinto ferial al antiguo Plan de Ocio de El Arenal, que se impulsó por parte del gobierno de Rosa Aguilar a principios de los años 2000.

La Feria no tendrá toldos, pero sí baños de obra e hilo musical en la Calle del Infierno

Según González, instalaciones fijas que tienen estas casetas y que, según los caseteros, representan una irregularidad y una forma de competencia desleal con el resto, "siempre han tenido un trato diferenciado" debido a ese plan que pretendía trasladar la movida nocturna al recinto ferial y que construyó en esa zona una serie de casetas que se asignaban durante la Feria a los partidos y sindicatos y servían el resto del año para otros fines.

El plan al que se refiere consiguió que durante una serie de veranos el ocio nocturno tuviera su epicentro en El Arenal, con una serie de locales además de una zona de peroles y un botellódromo. Aquella iniciativa acabó desinflándose y desde entonces permanecen en pie esas casetas, la mayoría de las cuales solo funcionan durante la Feria.

La realidad es que en las bases, como indica la Asociación de Casetas Tradicionales, no se reconoce un trato diferenciado para estas instalaciones, cuya estructura se sigue respetando al final de cada Feria.

'S VISUAL' PARA PERSONAS SORDAS

Por otro lado, la alcaldesa y los concejales de todos los servicios que actúan en El Arenal durante la Feria han presentado la que pretende ser la edición "más inclusiva", al incorporar medidas como un sistema virtual de intérprete de lenguaje de signos S Visual, dirigido a las personas sordas o con discapacidad auditiva. Estará en funcionamiento las 24 horas durante los días de Feria en la Caseta de Cruz Roja.

Además, el hilo musical que se empleará en la Calle del Infierno permitirá que durante dos días, los menores con trastorno del espectro autista puedan acudir a la feria, ya que la mañana del lunes y la tarde del martes se apagará la música para reducir al máximo la contaminación acústica que tanto les molesta.

Un año más, la Feria lanzará mensajes contra la violencia machista, esta vez, con una campaña del NO ES NO, que tendrá como soporte abanicos, cartelería y otros medios y que se completará con la mayor iluminación de la zona próxima al río para evitar que la oscuridad pueda propiciar agresiones.